Eftrapios pidió el relevo al no atenderse sus reclamaciones

Costazos Eftrapios, el capitán que gobernó el petrolero Prestige hasta que fue relevado por Apostolos Mangouras, secuen-ció con minuciosidad cómo llegó a alcanzar las máximas cimas del hartazgo ante la falta de respuesta por parte de los gestores del barco, oficialmente Universe Maritime, a sus denuncias sobre las graves deficiencias del petrolero. Su descarnado relato figura en una carta que envió a los responsables societarios del buque a finales del mes de julio de 2002. Su texto rezaba así: "Como es sabido, el 7 de junio de 2002 yo embarqué en su buque para asumir el mando. El día 8 del mismo mes insistí a sus representantes a bordo que yo no asumiría el mando debido a las inadecuadas condiciones de vida a bordo, hecho que también fue confirmado por ellos.

Ellos se comunicaron con ustedes por teléfono, les dije que sería mejor que yo no asumiera el mando, que yo debería volver a casa, dado que estaba seguro de que nos procuraríamos enfadar en el transcurso de mi asignación (sic); además yo no quise, y sigo sin querer, cambiar la operativa de su compañía dado que eran temas crónicos que ustedes conocían bien.

Ustedes me prometieron que prestarían atención y mejorarían las condiciones de vida y, consecuentemente, yo acepté asumir el mando. Durante el viaje continué informándoles a ustedes de las deficiencias del buque, y sus promesas fueron que los problemas se resolverían en el puerto de destino. Hoy estamos en el día 32 [de navegación] en San Petersburgo, el buque está en el fondeadero A, (buque almacén) operativo las 24 horas. Durante todos los días previos, no sólo es que ustedes no hayan arreglado ni uno solo de los problemas, sino que los problemas se han incrementado, teniendo a bordo 10 huéspedes en exceso (sic)".

"Rescindo mi contrato"

El relato continúa: "Me encuentro en la lamentable situación de informarles a ustedes de que por la presente rescindo mi contrato de empleo y requiero mi inmediata sustitución por las mismas razones por las que les informé a ustedes cuando estábamos en Kalamata, que son las inadecuadas condiciones de vida; lo lamento sinceramente, pero créanme que en mis 40 años de servicio en la mar nunca hice una cosa igual en todos los puestos que he desempeñado. Les estoy diciendo honestamente de nuevo que las condiciones son inadecuadas. Por favor, arreglen mi sustitución tan pronto como sea posible".

Paralelamente a la anunciada dimisión de Eftrapios, Mangouras iba renovando sus títulos, pero esta vez no en Grecia, donde por edad estaba jubilado, sino en Chipre.