La gota

Soy un vecino de Bustarviejo que trabaja en Madrid. Utilizo el autobús 725 todos los días laborables. Son ya varias las ocasiones, cinco al menos o quizás seis, en menos de un año que, por oídas, me he ido enterando de que la causa de varios retrasos de horas son accidentes de tráfico.

Una vez, un camión volcado en las cercanías de la cárcel de Soto; otra vez, un camión cisterna volcado en Miraflores de la Sierra; otra vez, no consigo enterarme, y hoy (jueves 30 de octubre), un camión desplomado desde un puente en la carretera nacional I; otro par de veces más, las fuertes nevadas que, aunque el teléfono de información de la empresa lo niegue, impiden el paso de los autobuses, en fin, por cualquier cosa...

La empresa de transportes o el Consorcio de Transporte de la Comunidad deben tener alguna responsabilidad. Sobre todo tienen la responsabilidad de las horas perdidas por algunos cientos de ciudadanos, y digo bien, algunos cientos de ciudadanos y ciudadanas que todos los días que sucede algo nos empujamos para coger asiento porque viajar de pie en estos autobuses se puede convertir en un deporte de riesgo. Por eso desde esta carta quiero plantear a la compañía de transporte y al Consorcio de Transporte que cuando sucedan estos accidentes o imprevistos articulen alguna medida, que podría consistir en rutas alternativas para que la ciudadanía de la sierra Norte no tuviese que padecer las consecuencias de esas tragedias.