Los partidos hacen 'tele'

Los equipos de campaña de los grandes partidos -el PSC y CiU en las catalanas, y también el PP en algunas ocasiones- contratan a empresas privadas el alquiler de sus propios equipos de televisión y radioenlaces. Y ofrecen a las televisiones, si no pueden llegar a tiempo a un directo o quieren unas determinadas imágenes de sus líderes, la posibilidad de que ellos se las suministren. No sólo fijan el minutaje, sino que ofrecen contenidos. En general, las televisiones públicas no aceptan que se les entregue editado un reportaje mitinero. No se descarta, sin embargo, que sí acepten un radioenlace para un directo cuando no tienen el equipo a mano y que alguna televisión privada recurra a imágenes editadas por el partido.

Ello coloca en clara desventaja a los partidos sin tanta logística televisiva porque en el directo, un mitin por ejemplo, quien escoge lo que los telespectadores van a oír es el mitinero. Avisado de que está en directo, deja de decir lo que estaba diciendo a la audiencia local y coloca en la pequeña pantalla el mensaje que le interesa. El tema llegó a tratarse en el Consejo de Administración de la Corporación Catalana de RTV y el director de TV-3 aseguró que la producción de las noticias electorales será responsabilidad exclusiva de la redacción.

Pero a veces ni siquiera hace falta rascarse el bolsillo. En 1994, en unas europeas, en la plaza mayor de Baracaldo se celebraba un mitin de un partido. Llegaron los chicos de una televisión, instalaron la cámara y la dejaron en stand-by. "Aunque sea cautelarmente, ¿por qué no lo grabáis?", pregunté. Y me enseñaron un papel en el que se especificaba que el tercer ponente, en el minuto cuatro, iba a decir tal cosa. Las frases iban entrecomilladas. Cuando se acercó el minuto cuatro, le dieron al on de la cámara y, efectivamente, el líder que en aquel momento ocupaba la tribuna recitó la frase. Una vez recogida, los chicos de aquella tele le dieron al off y se fueron. Encargo cumplido.