Una inversión estratégica en esperanza

"Distinguidos colegas: todos estamos hoy aquí para hacer una inversión estratégica en esperanza". Así inició Colin Powell su discurso en la Conferencia de Donantes, en el que combinó sentimentalismo y firmeza. Afirmó que después de tres décadas de "monstruoso desgobierno de un régimen tan corrupto como cruel", Irak avanzaba cada día en la recuperación de su plena soberanía. Después aseguró que las fuerzas de la coalición están decididas "a acabar con los partidarios de Sadam y a eliminar a los elementos terroristas".

Powell subrayó que el nuevo "consenso internacional" derivado de la aprobación de la resolución 1.511 por el Consejo de Seguridad de la ONU "es lo que se necesitaba para impulsar el progreso de Irak", y que era el momento para que la comunidad internacional fuera "generosa en dinero, formación y oportunidades". Terminó afirmando que los 20.000 millones de dólares que EE UU destinará a la reconstrucción es "la suma más grande jamás comprometida por un país en una conferencia de donantes".