España es el país que menos empleo da a los discapacitados

"Las condiciones de vida y de trabajo en España son más nocivas para la salud y producen más accidentes graves que en el resto de la Unión". Esto explica que, pese a ser el tercer país con menor porcentaje de población discapacitada en edad laboral (9,9%, frente al 14,5% comunitario), España supere la media de la UE a partir de los 60 años (32,2% y 31,7%, respectivamente). Así lo establece un estudio presentado ayer por la Fundación La Caixa. También destaca que España es el país que menos empleo da a los discapacitados, especialmente a las mujeres.

El estudio establece que en las familias con ingresos bajos se registra el triple de casos de discapacidad que entre las de mayor renta. Resalta que España es el país con menor porcentaje de discapacitados con empleo: el 31,5% de los hombres y el 15,8% de las mujeres. Según los autores, la obligación de las empresas de más de 50 trabajadores de dar el 2% de los puestos a discapacitados ha sido un fracaso: sólo se han generado 11.500 empleos por esta vía.

El volumen La inserción laboral de las personas con discapacidades analiza los datos de la encuesta nacional elaborada por el Instituto Nacional de Estadística en 70.000 hogares el año 1999. Aquel trabajo reveló que nueve de cada 100 ciudadanos, 3,5 millones, sufren alguna deficiencia funcional que les supone un freno en sus actividades cotidianas. Las más frecuentes son las físicas, generalmente debidas a problemas osteoarticulares, que dificultan la movilidad. Así, más de dos millones de personas tienen dificultad para salir de casa sin ayuda. Sufren esta deficiencia el 52,8% de las mujeres y el 44,9% de los hombres con discapacidad en edad laboral (de 16 a 64 años). A continuación se sitúan las discapacidades sensoriales (vista, oído y habla). Las padece el 33,9% de los varones en edad laboral con alguna deficiencia y el 31,5% de las mujeres. En tercer lugar corresponde a las deficiencias psíquicas, como el retraso mental o las demencias (19% de los casos masculinos y 12,4% de los femeninos). No obstante, algunas personas pueden padecer varios tipos de discapacidad y ésta puede ser grave o moderada.

Gasto bajo en salud

Tras estudiar también los datos europeos de Eurostat, los autores del estudio (Carlos Pereda, Miguel Ángel de Prada y Walter Actis) analizan por qué se dispara la proporción de españoles con discapacidad a partir de los 60 años por encima de la media comunitaria. "Si tenemos en cuenta que las discapacidades que sobrevienen a las personas adultas tienen su origen en las enfermedades y los accidentes, habría que deducir que las condiciones de vida y de trabajo en España son más nocivas para la salud y producen más accidentes graves que en el resto de la Unión", concluyen los autores. Añaden que España "ocupa el primer lugar de la Unión en siniestralidad laboral

[la sufre el 7% de los trabajadores frente al 4% de media en la UE] y uno de los puestos más altos en accidentes de tráfico". También influyen la precariedad laboral y el bajo gasto en salud por habitante (España es el tercer país con menor gasto), añadió Pereda.