ISO retira el proyecto de cobrar por el uso de sus normas

La polémica no ha durado ni una semana. ISO, la organización internacional de estandarización, no cobrará por el uso de sus códigos de país (ISO 3166), lenguaje (ISO 639) y moneda (ISO 4127), muy utilizados en el desarrollo de Internet.

ISO es uno de los organismos que elaboran normas técnicas que proporcionan un lenguaje tecnológico común para facilitar el intercambio de mercancías, servicios y tecnologías.

A finales de septiembre, una carta de Tim Berners-Lee, presidente del W3C, el consorcio que emite las recomendaciones tecnológicas sobre Internet, alertaba al presidente de ISO de que su proyecto de cobrar por el uso de estos códigos podía frenar el desarrollo de la Red ya que originaría la proliferación de normas de estandarización abiertas y distintas a las suyas; en definitiva, que dos códigos diferentes se podrían referir al mismo país.

En un comunicado, este organismo dice: "ISO continuará con su práctica establecida: permitir la utilización gratuita, en aplicaciones comerciales y en otras, de sus códigos de país, moneda e idioma. ISO no se encuentra actualmente estudiando ninguna propuesta para imponer ingresos por el uso de estos códigos, incluyendo a los que afectan al World Wide Web o al software. ISO revisa continuamente sus prácticas y productos para ofrecer productos de valor añadido a sus clientes. En referencia al código 3166, ISO está considerando una propuesta para desarrollar una solución global que facilitará la incorporación y mantenimiento de estos códigos en los productos tecnológicos. Esta solución, que está siendo estudiada, incluye actualizaciones regulares y sería un servicio de pago. Sin embargo, todavía no se ha tomado una decisión e, incluso, si así fuera, ISO seguiría permitiendo el uso gratuito de sus códigos de país, moneda e idioma".