Imaz atribuye la caída de la inversión exterior a la situación internacional
El consejero de Industria, Josu Jon Imaz, atribuyó ayer el fuerte descenso de la inversión extranjera en el País Vasco -un 82,4% en 2002- al frenazo de la economía dentro de la UE y a otros factores externos, como la escasa capacidad exportadora de EEUU.
Interpelado por los socialistas en el pleno del Parlamento, Imaz rechazó tajantemente la posibilidad de que ese descenso obedezca a la situación política vasca, con causas como el enfrentamiento por el plan Ibarretxe o la violencia de ETA. "Eso sería como decir que en 2001 la subida en un 164% de la inversión extranjera en Euskadi se debió a la felicidad que proporcionó a los inversores la victoria electoral de la coalición PNV-EA", ironizó Imaz.
El socialista Miguel Ángel Uzquiza consideró muy grave que las inversiones extranjeras en Euskadi supongan actualmente apenas el 1% de las registradas en el conjunto de España "cuando hemos llegado a representar el casi el 10%". Urquiza recordó que sus argumentos son los mismos que utiliza la patronal. "Los empresarios ya le han dicho que la inestabilidad política ahuyenta a los capitales y a las inversiones", le espetó al consejero.
Reconversión
Imaz restó importancia a estas críticas y recordó que en 2002 la inversión extranjera cayó, por ejemplo, en la Comunidad Valenciana un 92%. Echó mano de los datos del bienio 2001-2002 para explicar que la mala situación de la economía global arroja unas cifras aún peores, ya que en Euskadi la inversión productiva cayó en ese plazo un 62%, pero en el conjunto de España descendió un 61%, en Madrid un 75% y en Valencia un 87%.
Frente a las críticas socialistas de que en los últimos 25 años el PIB vasco ha cedido, Imaz explicó que las reconversiones de la década de los 80 destruyeron el tejido industrial de la comunidad autónoma y ofreció datos del PIB de 1995 a 2002, para concluir que Euskadi ha registrado la mayor subida de toda España con 12 puntos.
[Todos los grupos del Parlamento vasco, menos el del PP, aprobaron ayer una proposición no de ley en la que se insta al Gobierno central y a las Cortes a que aprueben una ley de solidaridad con las víctimas del 3 de Marzo en Vitoria.
El texto aprobado exige que los familiares de los cinco fallecidos y de los heridos en la carga policial de aquel día de 1976 en la capital alavesa sean indemnizados igual que las víctimas del terrorismo. Igualmente respalda la iniciativa planteada por la Asociación de Víctimas del 3 de Marzo ante el Tribunal de Estrasburgo].
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