Iranzo insta a producir muebles en el exterior y para las rentas más bajas

Juan Iranzo, director del Instituto de Estudios Económicos (IEE), invitó ayer a los profesionales del mueble a aprovechar la calidad y bajo precio de la mano de obra que ofrecen los países del este de Europa que aspiran a incorporarse en la Unión Europea para producir con menores costes y, por otro lado, a aprovechar el potencial de consumo que representan las rentas más bajas y los dos millones de inmigrantes que, estimó, residen en España.

Un centenar largo de profesionales e industriales del mueble asistieron a la conferencia sobre las perspectivas de distribución de sus productos que el director del IEE ofreció en la Feria de Valencia con ocasión del certamen del sector. Iranzo subrayó la debilidad de las economías alemana y francesa, los dos principales destinos de las exportaciones españolas; apuntó a Estados Unidos como "única locomotora" de la economía mundial en el momento presente; pero sugirió que tanto China como India, "cuando ganen presencia internacional", ejercerán como verdaderos motores del comercio internacional.

Así las cosas, el catedrático de Economía Aplicada destacó que sólo la demanda interna sostiene las tasas de crecimiento que ha registrado España en los últimos años. "El consumo nacional y la inversión en construcción son los dos grandes motores de la economía española", afirmó. Y para reducir costes y mantener una oferta asequible, Iranzo alabó la calidad de la mano de obra en los países candidatos a la ampliación de la Unión Europea y los bajos costes laborales para invitar a los profesionales a trasladar su producción.

En perfecta sintonía con la política económica del Gobierno del PP, Iranzo destacó el "aumento de la disponibilidad de renta" de los españoles a raíz de las sucesivas rebajas del IRPF, que cifró en una media del 11% y elevó hasta el 30% para las rentas más bajas. "Las rentas bajas generan tres puntos de crecimiento del consumo porque los pobres no ahorran, cuando tienen una necesidad, gastan", dijo.

Iranzo dedicó capítulo aparte a los inmigrantes. Por un lado, "los inmigrantes, si no de iure si de facto, han reducido los costes laborales y han flexibilizado el mercado laboral". Por otro, "ahora viven hacinados, pero, a medida que vayamos legalizándolos, tenderán a la reunificación familiar" y, naturalmente, comprarán muebles.

Según Iranzo, la importancia del movimiento económico que gira en torno a los dos millones de inmigrantes residentes en España es tal que "tanto el sector eléctrico como el de construcción ya tienen en cuenta el fenómeno".

Iranzo también señaló la importancia creciente del asentamiento de jubilados "alemanes pero también ingleses" en una franja próxima a la costa mediterránea, aseguró que hasta medio millón de tales clientes potenciales tienen previsto instalarse a medio plazo y destacó que sus necesidades desbordan el tradicional mueble de segunda residencia porque vienen con vocación de instalarse durante periodos largos.