Rajoy propone al PSOE crear una mayoría democrática contra "la ruptura nacionalista"

Mariano Rajoy propuso ayer al PSOE "construir una alternativa democrática contra la ruptura nacionalista" que, a su juicio, supone el plan Ibarretxe. El nuevo líder del PP mantiene que el lehendakari consumó el viernes la "ruptura unilateral con el pacto político para la convivencia" que son la Constitución y el Estatuto vasco. "Rompe con la mayoría de los demócratas y apuesta por un pacto con los nacionalistas, con lo que eran Batasuna, ETA y todos los que la constituían", afirmó. Según Rajoy, Juan José Ibarretxe defiende un plazo tan largo de puesta en marcha de su plan para "esperar a ver si hay en España un Gobierno más débil". Y los perjudicados son "la sociedad, la economía y los amenazados por ETA".

"Es obligado construir una alternativa democrática, constitucionalista y estatutaria como la que hubo en las últimas elecciones. Que nadie se llame a engaño: esto es una auténtica necesidad por encima de cualquier suerte de intereses partidistas", proclamó ayer Rajoy en una rueda de prensa en la sede del PP para responder al plan Ibarretxe.

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, expuso el viernes en el Parlamento vasco lo que él denomina "un nuevo pacto político para la convivencia". Rajoy mantiene que lo que hizo fue "romper unilateralmente el pacto político para la convivencia" que son la Constitución y el Estatuto vasco. Ese pacto constitucional, según el candidato del PP a la presidencia del Gobierno, "lo votaron la mayoría de los vascos y de él sólo se excluye a ETA". El 25 de octubre de 1979 votaron a favor del Estatuto vasco el 95%. En contra, el 5%. La participación en ese referéndum fue del 59%.

Rajoy aseguró ayer que Ibarretxe, con su anuncio solemne en el Parlamento vasco, "rompe la convivencia, no respeta la voluntad de miles de personas [en el País Vasco] y, sobre todo, olvida que no hay mayor prioridad que la vida, la libertad, los derechos humanos y la no-exclusión de quienes no piensan como tú".

Los grandes perjudicados por el plan Ibarretxe y por el dilatado periodo hasta el anunciado referéndum -la primavera de 2005- son, según Rajoy, "la sociedad y la economía vascas, y, sobre todo, las miles de personas que pueden ser objetivo del terrorismo". El motivo es que, a su juicio, este nuevo escenario "hace que la lucha antiterrorista sea menos eficaz". Y ello, según Rajoy, porque Ibarretxe quiere sumar para su causa secesionista a ETA y todo su entorno. "A ETA hay que combatirla, y no se la combate asumiendo sus postulados. Hacerlo es como dar al ladrón lo que quiere robar para que así no tenga que robarlo", afirmó el líder popular.

La respuesta, en su opinión, pasa por "construir una gran mayoría a favor de la libertad, de los derechos, de lo pactado y de las reglas de juego". Rajoy recordó que "esa alternativa la hubo" en las elecciones vascas de 2001. "Y no quedó muy lejos de dejar de ser alternativa para convertirse en Gobierno". El PSE-PSOE se distanció después de esa estrategia, reivindicada cada poco por el líder de los populares vascos, Jaime Mayor Oreja. Rajoy abanderó ayer esta invitación como "obligada" porque, según él, se ha "demostrado que es lo que quieren miles y miles de vascos".

Rajoy no respondió si piensa llamar a Zapatero para proponerle personalmente este acuerdo. "Si vamos o no a hablar es algo que se verá en el futuro", replicó. Hace pocas semanas, cuando el líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, le conminó -a través de los medios de comunicación- a una "cumbre" entre ambos, Rajoy respondió que si se quiere hablar con alguien lo mejor es llamarle.

El líder del PP tampoco quiso dar detalles de por qué cree que Ibarretxe, con el largo y prolijo calendario de puesta en marcha de su plan, "espera a ver si hay un gobierno débil en España". Sólo enfatizó que con el PP en el gobierno no habrá "nada que dialogar" sobre el famoso plan.