Malestar con Ayala en el vestuario

Decepción. Ésa era ayer la sensación predominante en la plantilla del Valencia respecto a uno de sus miembros, Ayala. Algunos de sus compañeros pronunciaron palabras gruesas hacia el argentino, admirado y respetado hasta hace poco. No le perdonan que se haya borrado del partido de la Copa de la UEFA de hoy, en Estocolmo, ante el AIK Solna (Canal 9, 20.30), sobre todo tras la lesión de Pellegrino el sábado pasado en el estadio Calderón.

Pero también hubo quien se puso de su parte: su mejor amigo, el portero Cañizares, que declaró: "Ayala no se merece esto". ¿No se merece esto? ¿A qué se refiere?, se le preguntó. Entonces dudó y buscó una respuesta convincente hasta que, al final, pareció encontrarla: "A que es difícil desarrollar tu profesión cuando te llaman los mejores clubes de Europa

[en referencia al Barcelona y el Madrid]". En todo caso, su puesto, junto a Marchena, lo ocupará el canterano David Navarro, de 22 años, que frente el Atlético dio motivos para confiar en él.

"Buen futbolista. Pero, al primer problema serio, nos ha fallado". Frases como ésta, en alusión a Ayala, se oyeron ayer en el vuelo de cuatro horas a Suecia. Pese a justificar su ausencia por molestias en los isquiotibiales, el valencianismo da por sentado que Ayala, de 30 años, no disputa este encuentro como medida de presión a la directiva para que le aumente el sueldo: cobra 1,2 millones de euros netos por temporada y quiere llegar a los 2,8.

La indignación era evidente entre los consejeros, que estudian medidas drásticas contra el zaguero. Ya en agosto, cuando el club de Mestalla no aceptó traspasarlo al Barça, el capitán de la selección argentina amenazó con no volver a vestirse la zamarra del Valencia. Así las cosas, ante la visita del Madrid a Mestalla el sábado, parece que Ayala ha elegido un camino sin retorno.

Este conflicto ha eclipsado el estreno del cuadro de Rafa Benítez en la Copa de la UEFA ante un rival menor, que deambula en su Liga en la mitad de la tabla. Su única referencia es el ex zaragocista Sundgren, que no es titular. Su entrenador, Richard Money, fue jugador del Liverpool. Eso se nota en el modo de jugar, muy británico. "Rápido, fuerte y agresivo", lo definió Benítez.

El palmarés del AIK se limita a sus diez Ligas y siete Copas de Suecia. Nada destacable en Europa. Eso sí, su estadio, el Rasunda, acogió la final de la Copa del Mundo de 1958, aquélla en la que un jovencísimo Pelé deslumbró al planeta y llevó a Brasil a ganar por 2-5 al país anfitrión.

El Valencia llega crecido tras su 0-3 al Atlético. Pero el capitán, Albelda, es baja por sanción y Jorge López no puede jugar por haber participado este mismo curso en la Copa Intertoto, clasificatoria para la de la UEFA, con el Villarreal. Le suplirá Rufete.