El Gobierno y todos los partidos acusan a Otegi por ensalzar al etarra muerto en el tiroteo con la Ertzaintza

El portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, aseguró ayer que las declaraciones del dirigente de la ilegalizada Batasuna Arnaldo Otegi en la manifestación por la autodeterminación del sábado en Bilbao, en las que ensalzó al presunto etarra Arkaitz Otazua, muerto en la emboscada contra la Ertzaintza en el puerto alavés de Herrera, "merecen todo el desprecio y la condena" de los ciudadanos vascos. Imaz, en declaraciones a la cadena SER, agregó que es penoso que se puedan ensalzar actitudes de aquellos que "de una forma cobarde y vil pretendían asesinar a dos ertzainas que acudían a ese lugar a ayudar a dos personas que presumiblemente estaban accidentadas".

Todos los partidos democráticos criticaron también las palabras de Otegi. El portavoz del PP en el País Vasco, Leopoldo Barreda, calificó la marcha y las declaraciones de Otegi de "provocación clara y chulesca hacia el Estado de Derecho" de quienes "amparan y defienden el uso de la violencia". Barreda declaró que "en una sociedad democrática como la nuestra no caben los homenajes a los terroristas, y como ocurrió en la manifestación celebrada en agosto en San Sebastián, los responsables de estas convocatorias terminan respondiendo ante los tribunales".

Para el socialista Rodolfo Ares, en la marcha del sábado "se puso de manifiesto, una vez más, que los herederos de Batasuna han estado homenajeando al terrorista y haciendo claramente un acto de apoyo a ETA".

El presidente vizcaíno del PNV, Iñigo Urkullu, dijo que las palabras de Otegi "se descalifican por sí mismas" y suponen una persistencia en una "postura inmovilista" por parte de la izquierda abertzale.

El portavoz de la Presidencia de IU, Mikel Arana, lamentó que la marcha a favor de la autodeterminación se convirtiera "en un homenaje a un miembro de ETA. Lamentablemente Batasuna pervirtió el derecho de manifestación".

[El consejero de Interior, Javier Balza, aseguró ayer en una entrevista en El Correo que el final de ETA es "cuestión de tiempo" y que con los terroristas no hay nada que negociar].