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Gallardón da luz verde al desmontaje del aparcamiento de Santo Domingo

El alcalde ya prometió ese proyecto en 1999

Alberto Ruiz-Gallardón anunció ayer, desde su cargo de alcalde de Madrid, algo que ya prometió en 1999 cuando aspiraba a la presidencia de la Comunidad, y que no cumplió: la reforma de la plaza de Santo Domingo (Centro) para hacer una zona verde y soterrar el aparcamiento que hay construido en altura. El Consejo de Gobierno municipal ha aprobado sacar a concurso el proyecto, y los trabajos podrían empezar en un año. Esa obra, en el corazón de la ciudad, coincidirá con la construcción de una estación de cercanías en la Puerta del Sol y el desmontaje del scalextric de Cuatro Caminos.

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El aparcamiento de la plaza de Santo Domingo, el primer estacionamiento público que se construyó en España, allá por 1959, ha "destrozado" un espacio de 4.000 metros cuadrados, junto a la plaza de Callao y la Gran Vía, que Ruiz-Gallardón quiere "devolver al peatón". Eso mismo dijo el ahora alcalde hace cuatro años, cuando concurría como candidato del PP a las elecciones autonómicas y prometió enterrar las cuatro plantas del actual aparcamiento y construir sobre él una zona verde. El proyecto se quedó en promesa electoral. Ayer, el Gobierno municipal aprobó por fin sacarlo a concurso, y, según un portavoz de la Concejalía de Urbanismo, las obras podrían comenzar en otoño de 2004.

Antes de eso, el Ayuntamiento tendrá que negociar con el concesionario que tiene adjudicada desde hace años la explotación del aparcamiento, y al que previsiblemente habrá que indemnizar por el dinero que dejará de ingresar durante los meses que duren los trabajos. El estacionamiento tiene 580 plazas, que se mantendrán en el nuevo diseño subterráneo, y acoge en sus bajos varios locales comerciales, a los que también habrá que compensar.

Esta obra coincidirá en el tiempo y en el espacio con otra más controvertida que podría empezar en las próximas semanas: la construcción, por parte del Ministerio de Fomento, de la estación ferroviaria de Sol-Gran Vía, que abrirá las entrañas del centro histórico durante casi cuatro años. Algo más allá, en la glorieta de Cuatro Caminos (Tetuán), los operarios municipales comenzarán a desmontar, el próximo mes, el scalextric que sobrevuela la plaza para sustituirlo por un túnel que una la avenida de Reina Victoria y la calle de Raimundo Fernández Villaverde. Esa obra durará 16 meses. Y dentro de un año exactamente, en septiembre de 2004, el alcalde prevé comenzar la reforma de la carretera de circunvalación M-30, un macroproyecto de 3.000 millones de euros que el gobierno aún no ha precisado cómo financiará.

"La ciudad, para el peatón"

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Ruiz-Gallardón defendió todas estas obras como una forma de "recuperar la ciudad para el peatón", y aseguró que son parte de su política de "fomento del transporte público". A pesar de que todas ellas coincidirán en el tiempo, el Ayuntamiento aún no ha elaborado ningún estudio sobre la reordenación del tráfico para evitar el caos en la capital, según admitió la semana pasada el concejal de Seguridad y Servicios a la Comunidad, Pedro Calvo.

Respecto a la financiación de la reforma de la M-30, el alcalde insistió en que su equipo está estudiando crear una empresa pública -o utilizar una ya existente- a la que endosar esa gigantesca deuda de 3.000 millones de euros para que, a efectos jurídicos, no se contabilice como déficit del Ayuntamiento. Algo parecido a lo que hizo el PP en la Comunidad con la empresa Mintra para construir el Metrosur. Junto a esa fórmula, la Concejalía de Hacienda ha barajado siempre otras como la de establecer en algunos tramos de la M-30 el llamado peaje en la sombra: las empresas constructoras corren con los gastos de la obra pero, a cambio, reciben del Ayuntamiento un canon anual en función del número de vehículos que circule a diario por la carretera.

Ruiz-Gallardón también se refirió a los cortes de tráfico impuestos en la Puerta del Sol con motivo de la Semana de la Movilidad, y sugirió -aunque no confir-mó- que el nuevo horario de cierre (de 9.00 a 22.00, y no de 10.00 a 20.00 como es habitual) se mantendrá a partir del próximo martes. "En este asunto, como en el de los cortes de tráfico en la Casa de Campo, daremos siempre pasos hacia delante, nunca hacia atrás", se limitó a contestar.

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