La izquierda acude dividida a la batalla por el control del consejo de Caja Madrid

La división de la izquierda se consumó ayer con la presentación de candidaturas para la renovación de 12 de los 21 miembros del Consejo de Administración de Caja Madrid, que se votará el 29 de septiembre. Socialistas e IU competirán por un consejero en el apartado de ayuntamientos. Los dos sectores enfrentados de CC OO, se disputarán un puesto en el sector de "entidades representativas". Mientras, el PP acudirá con una lista en la que estará el actual presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, y el secretario general en Madrid, Ricardo Romero de Tejada.

Después de múltiples intentos de negociación a varias bandas y otros tantos enfados, la izquierda sólo parece haber logrado la unidad para un objetivo: intentar que no salga elegido el secretario general del PP, Ricardo Romero de Tejada, que se presenta por el sector de la Asamblea de Madrid. Allí toda la izquierda votará junta contra el PP, que tiene, sin embargo, muchas probabilidades de ganar dos de los tres consejeros en liza. Si el PSOE, que presenta dos listas distintas, logrará dos puestos, la mayoría en el consejo de administración de Cajamadrid (11 de los 21 consejeros) la conformarían consejeros de IU, PSOE, CCOO y UGT).

El intento de pacto dentro de la izquierda no ha funcionado debido a que IU se ha molestado porque el PSOE le quitó su apoyo para sacar un consejero por los ayuntamientos para dárselo a la UGT. La federación que dirige Fausto Fernández se resiste a asumir esa derrota, y está buscando otros acuerdos, al margen del PSOE y el sector crítico de CC OO, para hacerse con ese segundo consejero, ya que uno le corresponde por ley.

El PSOE decidió finalmente presentar cuatro listas. Dos en el sector de la Asamblea y otras dos en el sector de municipios, aunque una de ellas, auspiciada por los socialistas, está encabezada por una persona de UGT. Con ello, según fuentes socialistas, se intenta demostrar que no se trata de una candidatura "de los socialistas conchabados con los sindicatos", sino que cada uno tiene su lista.

El PP presentará una lista al Ayuntamiento, encabezada por Mercedes de la Merced y Alberto Recarte. Y otra a la Asamblea de Madrid con Blesa y Romero de Tejada.

La batalla será entre los socialistas e IU en el sector de municipios. IU asegura que cuenta con los votos de 27 independientes, además de los sindicalistas de CC OO afines al secretario general, José María Fidalgo, entre ellos la sección sindical de Caja Madrid. La competencia por los votos será feroz hasta última hora. Pero ayer se supo además que habrá otra batalla encarnizada dentro de la izquierda. En el sector de entidades representativas, donde se eligen dos consejeros, habrá tres listas. El PP tendrá la suya, a través de la patronal madrileña Ceim, y enfrente se evidenciará la fractura dentro de CC OO. Por un lado estará el líder de los críticos, Rodolfo Benito, y por el otro el catedrático Jaime González Prosper, afín a Fidalgo, introducido allí mediante el truco de que sea la Universidad Complutense quien lo propone y lo apoyen tres entidades, de las cuales dos son afines al PP.

La trama

Lo único que une a la izquierda es que nadie quiere a Romero de Tejada en Caja Madrid. Por eso es de prever que todos, PSOE, IU y sindicalistas de uno y otro cuño apoyen las listas socialistas por la Asamblea de Madrid para evitar que salga el secretario general de los populares, a quien la izquierda acusa de estar detrás de la supuesta trama que sobornó a dos diputados tránsfugas y forzó una nuevas elecciones autonómicas. Tan de acuerdo están, que IU promete que su voto será público, ante las dudas que habían planteado los socialistas sobre posibles pactos oscuros con el PP.

Lo que no ha hecho IU es aceptar la oferta que le hizo el PSOE de acudir como número dos en su lista por la Asamblea de Madrid o encabezar la segunda lista que finalmente ha presentado. De esta manera, los socialistas pretendían garantizarse el voto de IU.

La federación rechazó esta invitación con el argumento de que que no pueden acudir junto a los socialistas en una lista por la Asamblea de Madrid y luego competir con ellos en el sector de los municipios.

Además, el enfado de IU con el PSOE es mayúsculo, puesto que considera que al ofrecerle un puesto que hasta ahora era suyo a la UGT, les ha traicionado.