Una exposición revisa en Granada la historia del desnudo en el arte español del siglo XX

El desnudo, en contra de lo ocurrido en países del entorno europeo, no alcanzó hasta principios del siglo XX en las artes pictóricas y escultóricas de España un desarrollo y una proyección social comparable a las que gozaba en otros países. Ahora, un exposición en Granada revisa y se aproxima a las distintas opciones estéticas que se acercaron al desnudo como tema central en el periodo comprendido entre 1906 y 1939.

Después de Velázquez y Goya, pocos se atrevieron a tratar el desnudo en sus lienzos o con sus piedras hasta que, en el último tercio del siglo XIX, los artistas volvieron a revisitar el cuerpo humano al desnudo. La exposición que se podrá ver en Granada se titula Desnudo, una tradición moderna en el arte español, se mantendrá abierta desde hoy hasta el 26 de octubre y se desarrollará en dos salas de exposiciones. Del total de 41 obras elegidas por Javier Moya, comisario de la exposición, 28 obras permanecerán en el Centro Cultural de la General y 13 se exhibirán en el Carmen de la Fundación Rodríguez Acosta. Ambas instituciones son las patrocinadoras de la exposición.

Javier Moya, quien además de comisariar esta muestra es conservador de la granadina Fundación Rodríguez Acosta, explica que el origen de la exposición está "en la constatación de que, tras muchos años en los que se había tratado muy poco el desnudo, el final del siglo XIX y sobre todo el principio del siglo XX supone una vuelta sin complejos al desnudo, sobre todo al femenino".

El cultivo del desnudo en esos años tuvo dos vertientes según Moya. Por un lado, era la continuación de un género existente ya en la tradición académica de las bellas artes; por otro, significó un campo de experimentación hacia la vanguardia artística. "Romero de Torres, Zuloaga y Picasso fueron los primeros que volvieron a atreverse a hacer desnudos francos de la mujer, de frente; generalmente, prostitutas y representantes femeninas de la marginalidad", apunta Moya.

Entre los autores cuyas obras se podrán ver en Granada se encuentran pintores como Ignacio Zuloaga, Joaquín Sorolla, Joaquín Romero de Torres, Daniel Vázquez Díaz o José Gutiérrez Solana y escultores como Pablo Gargallo o Victorio Macho.

El criterio que ha definido la elección de las obras ha sido, cuenta el comisario, "la representatividad de los autores y sus obras en cuanto al tema del desnudo". "Además de por la calidad de las obras, hemos elegido algunas que no son conocidas, pero que debieran serlo", afirma.

La muestra se ha preparado durante más de un año y todas las obras -32 pinturas y 9 esculturas- proceden de préstamos de toda España, tanto de instituciones públicas como de colecciones particulares.

Algunas de las obras que se podrán ver en las dos sedes de esta exposición serán expuestas por vez primera desde mediados del siglo XX. Es el caso del óleo Juliette, camisa roja de Ignacio Zuloaga, que no se ha visto ni se ha reproducido desde los años cuarenta. En el balcón, óleo de Francisco Iturrino, se podrá volver a ver en público tras haber permanecido sin ser expuesto desde los años cincuenta, indicó el comisario de la muestra.