Detenido un delegado de LAB y su novia en la operación contra ETA
La Ertzaintza relaciona a los arrestados en Portugalete con el 'comando Vizcaya'
La Ertzaintza detuvo en la madrugada de ayer a dos personas dentro de la operación contra el comando Vizcaya de ETA que se inició el pasado viernes y que aún prosigue, según fuentes de la policía autonómica vasca. Los dos arrestados en Portugalete (Vizcaya) son Roberto Saiz Olmo, delegado en el hospital de Basurto del sindicato LAB (organización de la autodenominada izquierda abertzale) y su novia, Ana López Barrio.
La detención, según coincidieron en señalar fuentes de la Ertzaintza y de la izquierda abertzale, se produjo sobre las 4.15 horas en la calle Cristóbal Mello, en Portugalete, por agentes de paisano muy cerca de la comisaría de la Policía Municipal de esta localidad. Estas detenciones se suman a las cuatro realizadas el viernes: las de Gorka Martínez Arkarazo, el presunto coordinador del comando Vizcaya; Ziortza Fernández Larrazabal, Aitor Herrera Vieites y Aritza Ferrero Ruiz. Los cuatro pasarán a disposición judicial hoy o mañana. Además, la Ertzaintza no descarta nuevas detenciones.
La actuación contra el comando Vizcaya ha revelado una nueva forma de actuar de la organización terrorista, en la que un coordinador no fichado por la policía -en este caso Gorka Martínez- se encarga de controlar a varias células.
En la lonja utilizada por los terroristas en Galdakao (Vizcaya)como almacén y taller para la preparación de artefactos y coches bomba había 80 kilos de cloratita y 45 kilos de dinamita Tytadine. El local empleado por ETA desde el final de la tregua, en noviembre de 1999, sirvió también para abastecer al comando Vizcaya desde el año 2000. La Ertzaintza no descarta que las evidencias documentales y materiales encontradas en el local sirvan para esclarecer varios atentado perpetrados en los últimos tres años, además de revelar planes de la banda para el futuro inmediato.
Entre el armamento incautado se encontraron ocho granadas anticarro, dos escopetas, un fusil de asalto Cetme, un subfusil francés, tres pistolas de nueve milímetros y un revólver Astra, así como munición. De las tres pistolas, una es de origen chino, de la marca Norinco. Es la primera vez que se le inacuta a ETA un arma con esa procedencia. También se hallaron una bomba lapa, una bandeja dispuesta para hacer otro artefacto de este tipo, dos ollas para contener explosivos en un coche bomba, una bomba camuflada en una maceta y varios teléfonos móviles.
Renovación en la dirección
Al comando Vizcaya se le atribuyen ocho atentados en 2003. Ninguno causó víctimas y tres de ellos resultaron fallidos. El primer atentado, fallido, lo realizó en febrero contra un ertzaina en Murueta (Vizcaya). Ese ataque puso fin a cinco meses de inactividad terrorista en esa provincia tras la muerte en septiembre del año pasado de dos liberados del comando, Egoitz Gurrutxaga y Hodei Galarraga, al explotar la bomba que transportaban.
Fuentes de la lucha antiterrorista creen que el cambio de táctica de ETA está también unido a una renovación en la dirección. Según informa Europa Press, la principal novedad es la incorporación al comité ejecutivo de ETA de Gorka Palacios Alday, antiguo liberado (a sueldo de la banda) en los Comandos Madrid y Andalucía y uno de los etarras más buscados por las Fuerzas de Seguridad.
Gorka Palacios, de 29 años, habría accedido a la cúpula etarra tras su ascenso como jefe del aparato militar encargado de la actividad de los comandos operativos de la banda terrorista. Palacios ha impartido, al parecer, instrucciones precisas para mejorar el adiestramiento de nuevos miembros de la banda terrorista en el manejo de armas y explosivos.
También se le considera el promotor de medidas de seguridad internas, como la de limitar los desplazamientos de los terroristas para reducir el riesgo que supone para los etarras acudir a entregas de explosivos y citas en puntos de encuentro habituales. Las mismas fuentes reconocieron albergar dudas respecto a la permanencia de Ibón Fernández Iradi, Susper; Mikel Albisu Iriarte, Mikel Antza, y Félix Alberto López de la Calle Gauna, Mobutu, en la dirección de ETA. Las dudas llegan de la ausencia de pistas sobre estos activistas. Susper se fugó en diciembre del pasado año de la comisaría de Bayona después de ser capturado por la policía francesa. Mobutu, que fue número dos de ETA tras la caída de la cúpula en Bidart (1992), logró escapar en noviembre de 2001 del hotel de Aubusson (Francia) donde se encontraba en residencia vigilada.
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