Los sindicatos rechazan que los exámenes de septiembre sean en julio
La propuesta lanzada el sábado a los profesores y sindicatos por parte del consejero de Educación, Esteban González Pons, para trasladar a finales de julio los exámenes de repesca que ahora se hacen en septiembre no fue ayer bien acogido por las principales centrales sindicales. El STEPV y Fete-UGT califican la propuesta de "poco pedagógica" y consideran que no ha sido "suficientemente meditada". Los sindicatos piden al consejero que "deje de hacer anuncios y se dedique a solucionar los problemas del sistema público educativo".
Vicent Maurí, de la dirección del STEPV (Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament), calificó ayer de "inviable" desde el punto de vista organizativo de los centros esta propuesta de celebrar en julio los exámenes de septiembre, ya que durante el mes de julio, aunque no haya clases lectivas, es cuando se celebran los concursos de traslado y oposición, se realizan las evaluaciones finales y se hacen exámenes finales. "Además esta propuesta trastocaría la organización de las vacaciones de decenas de familias, y obligaría a algunas empresas a cambiar turnos de trabajo ".
STEPV y Fete-UGT coinciden en que esta idea es "poco pedagógica y carece de fundamento". "Si a un alumno ahora le cuesta bastante prepararse los exámenes de septiembre con dos meses de tiempo, ¿como obtendrá más rendimiento escolar, después de todo el curso estudiando, apenas con cuatro semanas de tiempo para preparar la recuperación?", se preguntaba ayer Miguel Asensio, responsable de Comunicación en la ejecutiva de UGT.
Calendario escolar
UGT cree que esta propuesta "no tiene ningún sentido, con los alumnos hay que hacer pocos experimentos y menos cuando se habla de exámenes finales", puntualizó Asensio. Para este dirigente sindical el problema de fondo es la confección del calendario escolar. "Ese calendario debe estar sujeto a necesidades pedagógicas, y no como ahora, que está en función de las fiestas religiosas de este país", dijo Asensio, que emplazó al consejero de Educación a mejorar ese calendario para evitar que, como ocurre ahora, algunos trimestres se prolonguen durante cuatro meses, y otros sean más cortos de lo habitual.
Vicent Maurí cree que la propuesta de González Pons ha sido "poco reflexionada y que la hecho sin meditar". El STEPV emplaza al consejero de Educación a que "deje de lanzar anuncios, promesas y proyectos grandilocuentes y pase a ejercer política solucionando los muchos y complejos problemas de la enseñanza pública", dijo Maurí.
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