Argentina y el FMI confían en lograr otro pacto sobre la deuda

El Fondo Monetario Internacional (FMI) y Argentina negocian un nuevo acuerdo que permita a este país aplazar su deuda con el organismo, al expirar hoy el pacto vigente hasta ahora. En enero del año pasado, el Ejecutivo argentino firmó con el fondo un pacto de transición por valor de 2.170 millones de dólares (1.976 millones de euros). Ahora, ambas partes intentarán alcanzar un nuevo compromiso por el que Argentina pueda aplazar 13.600 millones de dólares (12.381 millones de euros) de deuda con el FMI hasta 2006.

Tanto el fondo como el Gobierno de Néstor Kirchner reconocen que existen dificultades en la negociación, pero confían en lograr un acuerdo. De no renovarse éste, Buenos Aires deberá hacer frente el mismo 9 de septiembre a un pago al organismo de crédito por valor de 2.900 millones de dólares (2.640 millones de euros).

Ante la urgencia de las conversaciones, el representante permanente del fondo en Buenos Aires, John Dodsworth, viajó el pasado jueves a la capital argentina, cuatro días antes de lo previsto, para retomar la negociación. Ese mismo día, el organismo anunció un desembolso de 310 millones de dólares (282 millones de euros), el último incluido en el acuerdo que expira hoy. Aunque se espera que una nueva misión técnica se desplace al país o que una argentina viaje a Washington, hasta el momento no se ha fijado ninguna fecha.

Reducción de la pobreza

Las negociaciones se desarrollan "dentro del calendario previsto", según el FMI. "El fondo continúa trabajando estrechamente con las autoridades para construir un sólido programa a medio plazo que facilite un fuerte crecimiento y la reducción de la pobreza, mientras que permite a Argentina recuperar el sostenimiento fiscal", ha afirmado el director general del fondo, Horst Köhler. Por su parte, el jefe de Gabinete argentino, Alberto Fernández, señala: "Estamos convencidos de que vamos a llegar a tiempo y de que la negociación avanza bien".

Pese a que las autoridades argentinas pretenden cerrar un trato rápidamente, también insisten en que no se firmará "ningún acuerdo" que postergue la reactivación económica y que no se pueda cumplir. Buenos Aires aspira a que el acuerdo recoja unas previsiones de superávit fiscal del 3% del producto interior bruto (PIB). Los funcionarios del fondo no quieren situarlo por debajo del 3,5% para 2004.

Con el nuevo acuerdo, Argentina pretende, además de refinanciar los vencimientos de su crédito con el fondo, negociar los pagos de deudas con el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo. El país también mejoraría su situación para pedir una rebaja de deudas con acreedores privados. Entre ellas se cuentan bonos por 76.000 millones de dólares (69.191 millones de euros), en suspensión de pagos desde finales de 2001.