Espadaler quiere gestionar los bosques quemados de pequeños propietarios

El consejero de Medio Ambiente, Ramon Espadaler, propuso ayer que los propietarios de pequeños terrenos de bosque arrasados por incendios forestales los cedan temporalmente a la Generalitat para que ésta se encargue de gestionar su recuperación. El consejero destacó que la prioridad en las tareas de regeneración de los terrenos afectados por los incendios de Maçanet de la Selva sigue siendo la retirada de la madera quemada y se mostró partidario de que los pequeños bosques sean gestionados mediante convenios con la Generalitat. En declaraciones a Catalunya Ràdio, Espadaler explicó también que aún no se ha decidido la cuantía de la subvención que recibirán los propietarios forestales por hectárea de terreno quemada.

Sin embargo, advirtió de que en lugares como Maçanet la propiedad de las zonas forestales está atomizada y que habrá problemas para identificar a los propietarios de algunas fincas, que "a veces son gente que no están ni viven en el territorio". Por este motivo, ha apuntado que la Generalitat se está planteando impulsar convenios en los que los propietarios cedan sus terrenos "durante un tiempo determinado"; "podríamos decir unos 10 años", para que la Administración los gestione. Por otra parte, el Ayuntamiento de Maçanet de la Selva está llevando a cabo la valoración de los daños originados por los incendios y mañana se reunirá con los vecinos para explicarles el proceso que se seguirá para limpiar la zona.El sindicato UGT también presentó ayer su programa en materia de gestión forestal y prevención de incendios, un programa que contempla la expropiación por parte de la Administración de los bosques de titularidad privada que estén descuidados.

El sindicato considera "insuficientes" las medidas de la Administración en materia de prevención y extinción de los incendios en Cataluña, unos incendios que sólo en la última semana han quemado más de 6.000 hectáreas.

La secretaria de Medio Ambiente y Salud Laboral de UGT, Carme Simarro, explicó que, debido a las características del territorio catalán, donde "la mayoría de fincas en las zonas forestales forman masas compactas cargadas de ramas y matojos", es necesaria una regulación específica.

El sindicato propone incrementar las ayudas para cuidar y mejorar los bosques, fomentar su gestión y limpieza a través de la promoción de los usos industriales de la madera y profesionalizar los cuerpos de voluntarios forestales, además de continuar la construcción de infraestructuras básicas como puntos de agua, cortafuegos y pistas forestales.

En este sentido y con el objetivo de evitar el abandono de las áreas forestales, que son privadas en su mayoría, UGT pide que se contemple la posibilidad de expropiación de los bosques que "sean objeto de un mantenimiento inadecuado y que no apliquen la legislación vigente sobre prevención y extinción de incendios".

El responsable de UGT en el cuerpo de Bomberos de la Generalitat, Sergi Palacios, denunció también la "falta de medios, personal y vehículos en condiciones", que reclaman desde 1998, y pidió la agilización del Plan Director del Cuerpo de Bomberos que se está discutiendo en el Parlament. Este plan prevé la ampliación del cuerpo de Bomberos en 1.000 efectivos, 200 vehículos y la construcción de nuevos parques en seis años, pero el sindicato pide que se adelante lo máximo posible para que los bomberos catalanes estén "al nivel europeo que reclamamos hace años".

Según Palacios, que ha trabajado en la extinción de los incendios de este agosto, el modelo americano de extinción que se aplica "no funciona en Cataluña" ya que muchas urbanizaciones están construidas de manera dispersa en los bosques y los bomberos no pueden dedicarse sólo a apagar el fuego porque deben ocuparse de los habitantes y sus casas.

Otra propuesta en materia de gestión forestal la formuló ayer la Asociación de Empresarios Corcheros de Cataluña, que pidió a la Generalitat que regenere los bosques quemados recientemente con alcornoques, ya que este tipo de árbol "evitaría la desertización y ayudaría a frenar los incendios forestales".

La patronal corchera continúa reclamando a la Administración catalana la reforestación de las zonas quemadas con el alcornoque tipo Quercus sube, especie que a diferencia del pino o del eucalipto quema con dificultad y ayuda a evitar la desertización.