El juez sobresee la causa contra el único imputado de la muerte de Laura Orue

El titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Bilbao ha sobreseído los cargos contra Manuel Río Nieto, principal sospechoso de la muerte de la joven de Zeberio Laura Orue, por "falta de pruebas". El análisis de ADN realizado a varios pelos hallados en el vehículo del sospechoso ha dado resultado negativo. En su auto, el juez señala además que "no es excluíble que Laura Orue nunca llegara a abandonar su domicilio con vida", por lo que la investigación da un giro y se limita a una docena de personas.

Orue, de 21 años, desapareció la noche del 29 de agosto de 1999, cuando se disponía a reunirse con unas amigas en las fiestas de Llodio tras terminar su jornada laboral en un hostal. Los análisis forenses revelaron que el cuerpo de la joven, que fue encontrado semienterrado, no presentaba signos externos de violencia.

La nueva línea de investigación se inicia por un informe forense sobre los restos de comida hallados en el cuerpo de la joven. El abogado de Río Nieto, Fernando Apraiz, considera que el fallecimiento de Orue se produjo en su propia casa al asfixiarse con la cena. El letrado, que se basa en los datos de la autopsia, considera que no ha habido asesinato ni homicidio, sino enterramiento ilegal.

En su opinión, la joven se disponía a ir a las fiestas, cuando en la casa entró alguien, "quizá con la pretensión de llevarla a Llodio". El letrado cree que, tras ducharse y mientras se vestía, Orue tuvo vómitos y falleció asfixiada. La autopsia indicó que había llegado lechuga a sus pulmones y que había ingerido alcohol. "Si hay un período máximo de media hora para que desaparezca cualquier resto de lechuga del organismo y ella aparece con restos en los pulmones, tuvo que ser muy rápido. Mi defendido no pudo estar en su domicilio, es imposible", dice Apraiz.

El abogado, quien defiende que pudieron ser dos las personas que accedieron a la vivienda de Orue, por el peso del cadáver y el hueco que se realizó para enterrarla, señala en su hipótesis que esas personas se asustaron al ver que la joven había muerto y que se encontraba a medio vestir, sin pantalones. Por ello, decidieron enterrarla, sin que nadie se enterara de lo ocurrido.

Tratamiento psicológico

Río Nieto asegura que le han "arruinado" la vida desde que fue detenido en mayo hasta que el lunes el juez sobreseyó los cargos contra él y que precisa de tratamiento psicológico desde entonces, según recogía ayer Deia.

El joven reconoce que en el pueblo los vecinos han reaccionado "mal" tras su paso por la cárcel. Cree que pudo ser su adicción a las drogas lo que influyó en que fuera acusado del homicidio, ya que declaró ante la Ertzaintza como el resto de jóvenes del pueblo. Una vez sobreseído el caso, Río afirma sentirse "bastante decepcionado" por el funcionamiento de la justicia.