El PSOE expulsa a sus concejales e insta a que actúe Anticorrupción

Los miembros del Grupo Socialista de Marbella que han suscrito la moción de censura junto con un sector del GIL y el Partido Andalucista fueron expulsados anoche del partido, a instancias de la ejecutiva provincial malagueña, por la ejecutiva federal que es a quien corresponde esta medida extrema. Las instrucciones las dio el secretario de Política Municipal, Álvaro Cuesta quien, además, pidió al Fiscal Anticorrupción que actúe de oficio. "Lamentamos muchísimo y expresamos nuestra más profunda tristeza porque los concejales socialistas hayan dilapidado el crédito acumulado durante años de defensa de la honradez en la vida pública", dijo Cuesta.

Los responsables provinciales, regionales y federales del PSOE tomaron la decisión de expulsar del partido a los cinco concejales socialistas después de conocer los hechos y la actitud de la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Marbella, Isabel García Marcos, a la que el responsable federal del PSOE, Álvaro Cuesta, acompañó en el mitin electoral de fin de campaña con el argumento de la lucha contra la corrupción frente al GIL.

"Los socialistas nunca debían haber amparado a personas y situaciones que no merecen el más mínimo apoyo a la vista de la gestión y de su enriquecimiento personal y patrimonial injustificado", señala Cuesta en referencia al gerente de urbanismo destituido por el alcalde Julián Muñoz y detonante de que el ex presidente de Marbella Jesús Gil haya actuado en contra de Muñoz.

"Reyerta entre clanes"

"Los socialistas no tenían que haberse inmiscuido en una reyerta entre clanes sobre los que pesa una losa de corrupción", insistió Cuesta. Este dirigente federal se trasladará la próxima semana a Marbella, junto con la secretaria general de Málaga, Marisa Bustunduy, para hacer frente a la situación en la que queda el partido por cuanto que la portavoz municipal, Isabel García Marcos, es también secretaria general del partido en Marbella, y ya está expulsada.

Cuesta antes de tomar la decisión de abrir un expediente y dictar la expulsión provisional, quiso saber los antecedentes y la actuación de los concejales durante el día de ayer. Se le informó de que la portavoz García Marcos no había atendido las llamadas telefónicas iniciales.

El día anterior, sin embargo, sí telefoneó al responsable regional de Política Municipal, Salvador Pendón, para indicarle que había sido convocada a una reunión por un grupo de concejales del Gil que querían poner una moción de censura.

Siempre según la versión que la ejecutiva regional, es decir, del PSOE de Andalucía, ha dado a Cuesta, se le dijo que no estaba autorizada a firmar esa moción de censura. A partir de ahí, es decir, del día anterior a los hechos, ya no hubo más comunicación de Isabel García Marcos con la dirección regional del partido.