Sanidad pagará 12.000 euros por no informar bien de una enferma

Isabel M. G. acudió el 2 de febrero de 1998 al centro de asistencia primaria por un dolor de cabeza intenso. El médico la remitió al hospital Doctor Peset. Después de ser atendida por un residente de medicina familiar y comunitaria, de vómitos, mareos, pérdida de conciencia durante 30 minutos, aturdimiento, rigidez en la nuca con dolor y vértigo, el médico le recetó Nolotil y Primperan. Consta que fue enviada a casa con mejoría apreciable, prácticamente asintomática. Pero a la mañana siguiente, Isabel ingresó de nuevo en Urgencias del Peset, donde el médico adjunto apreció signos meníngeos y sospechó de una hemorragia cerebral. Una vez practicadas las pruebas, Isabel fue enviada al hospital La Fe, porque el Peset carecía de servicio de Neurología. Murió el 16 de febrero. El marido, en su nombre y en el de la menor hija del matrimonio, presentó ante Sanidad una reclamación por deficiente atención sanitaria. Al serle desestimada, recurrió al juzgado. El Tribunal superior de Justicia (TSJ) considera que la atención médica fue correcta, que no se puede hablar de mala praxis. Sin embargo, entiende que no hubo la información adecuada a la familia sobre lo detectado en las sucesivas exploraciones de la paciente. Por ello, fija en 12.000 euros la indemnización.