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La planta de Fervasa no presenta sus cuentas en el registro desde 1999

El PP intenta controlar la crisis de la empresa con el cese del gerente

Sara Velert

La planta de tratamiento de las basuras de Valencia y su área metropolitana, Fervasa, no presenta sus cuentas en el Registro Mercantil desde 1999. A este incumplimiento, que acarreará una sanción, se suma la deuda de un millón de euros con Hacienda. La presidenta de la Entidad Metropolitana para el Tratamiento de Residuos, la concejal de Valencia María Jesús Puchalt, del PP, intenta controlar la crisis con el cese del gerente y el director financiero.

El conflicto en torno a la eliminación de los residuos de Valencia y otros 44 municipios de L'Horta, que se agudizó a principios de año con los cortes de carretera en Buñol y Macastre en protesta por el paso de los camiones de basura hacia el vertedero de Dos Aguas, se ha trasladado ahora a los despachos de Fervasa, que depende de la Entidad Metropolitana para el Tratamiento de Residuos (Emtre), bajo control del PP.

La crisis de la empresa se desató la semana pasada cuando el ahora ex gerente, Joaquín Díaz, y el director financiero, Fidel Blasco, pidieron la aprobación de un "elevado sobrecoste" en el presupuesto de la empresa para este año, según afirma María Jesús Puchalt, quien rechazó la medida. La presidenta del Emtre reclamó a Díaz que dejara el puesto al "perder la confianza" en su gestión. La exigencia de dimisión se extendió a Blasco, ya que al enfrentamiento por las cuentas se unió el hecho de que Hacienda había exigido hace meses a Fervasa que presentara un aval por una deuda de un millón de euros, requerimiento que Puchalt asegura que desconocía. La presidenta del Emtre acusa al ex director financiero de no haber informado de la notificación de Hacienda, que decidió el pasado viernes embargar la planta de residuos. Según la versión de Puchalt, Hacienda ofreció en febrero a Blasco la posibilidad de presentar un aval por el impago de cuotas de la Seguridad Social, entre otros conceptos.

La responsable del Emtre dice que no se enteró del problema hasta la semana pasada. El ex gerente, según Puchalt, "afirma que no sabía nada" del asunto; de Blasco la concejal desconoce si tiene alguna explicación al respecto. Joaquín Díez declinó ayer comentar su salida de Fervasa y Fidel Blasco no contestó a las llamadas de este periódico.

Para intentar frenar la crisis y la falta de control sobre la gestión de Fervasa, Puchalt ha decidido poner la empresa en manos de su hasta ahora asesor en el Ayuntamiento, Antonio Bernat. Sin embargo, no cree necesaria una investigación interna, y esperará a conocer la auditoría de las cuentas, que se conocerá en septiembre. Bernat, mientras, renegociará la deuda con Hacienda, una vez presentado el aval para detener el embargo, y retomará los concursos para las instalaciones previstas en el plan de residuos, que sufren un fuerte retraso.

El nuevo gerente deberá, además, resolver la situación de la empresa en el Registro Mercantil, ya que no se han presentado las cuentas desde 1999, una irregularidad de la que Bernat dice que también se han enterado estos días. El cierre de la hoja registral por el incumplimiento de los plazos para depositar las cuentas acarreará a Fervasa una sanción de entre 1.202 y 60.101 euros, de acuerdo a la Ley de Sociedades. Según el nuevo gerente, al disolverse en 1999 por una ley impulsada por el PP el Consell Metropolità de L'Horta, antiguo propietario de Fervasa, las cuentas pasaron a manos de la comisión encargada de liquidar los bienes de la entidad. Este organismo no era legalmente el "adecuado" para aprobarlas, explica Bernat. Las presidencias de las nuevas entidades metropolitanas, en manos del PP, no se votaron hasta octubre de 2001, y la constitución de las comisiones de gobierno se retrasó hasta octubre de 2002. Así, las cuentas de 1999, 2000 y 2001 no se aprobaron hasta ese momento. Pudieron registrarse entonces, pero Bernat afirma que "un defecto formal" lo impide, ya que faltan firmas de consejeros en las cuentas de 1999. Subsanado ese error, podrá registrarse el ejercicio de ese año y los posteriores. A la pregunta de por qué no se ha corregido antes ese error, Bernat no tiene respuesta.

Disputa política

Las entidades de residuos y de aguas residuales creadas por el PP después de que liquidara por ley el Consell Metropolità de L'Horta, nacieron marcadas por la disputa política. El PP copó las comisiones de gobierno, lo que llevó en octubre de 2002 a socialistas y EU a amenazar con abandonar los entes. La oposición acusa al PP de no facilitar información sobre Fervasa y Emarsa, que dependen de las entidades metropolitanas. La confrontación se ha hecho notar de nuevo al convocarse el concurso para sustituir a la obsoleta planta de Fervasa, situada en Quart de Poblet y Aldaia, cuyas alcaldesas, socialistas, acusaron a la entidad metropolitana de excluirlas del proceso. El concurso se declaró desierto en mayo, un retraso más en la resolución de la gestión de las basuras que deberá abordar el nuevo gerente de Fervasa.

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Sobre la firma

Sara Velert
Redactora de Internacional. Trabaja en EL PAÍS desde 1993, donde ha pasado también por la sección de Última Hora y ha cubierto en Valencia la información municipal, de medio ambiente y tribunales. Es licenciada en Geografía e Historia y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS, de cuya escuela ha sido profesora de redacción.

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