Dirigentes del PSOE y el PA respaldan en Cádiz la designación de Cabaña al frente de la institución provincial
El nuevo presidente de la Diputación de Cádiz, Francisco González Cabaña, asumió ayer, tras jurar el cargo en el acto de constitución de la corporación provincial, que "los retos fundamentales" de esta institución en los próximos cuatro años estarán en sintonía con "los pilares básicos" de la segunda modernización de Andalucía que preconiza el presidente de la Junta, Manuel Chaves.
El PSOE reeditó ayer el pacto provincial del anterior mandato con el Partido Andalucista y con Independientes Portuenses (IP). Sus trece diputados, más los dos del PA y el de IP le dan la mayoría para gobernar. En la oposición están el PP con 12 diputados y los dos del PSA de Pedro Pacheco que van de la mano tras el pacto entre ambas formaciones en Jerez. El único diputado de IU votó en blanco en protesta por el pacto socialista con IP. Al acto asistieron destacados dirigentes regionales del PSOE, como la vicesecretaria, María del Mar Moreno, el secretario de organización, Luis Pizarro, y el portavoz en el Parlamento Andaluz, José Caballos, además del secretario general del PA, Antonio Ortega, quienes negociaron el acuerdo entre socialistas y andalucistas en Diputación, que también incluyó el gobierno de Algeciras y San Fernando.
"Enmarco nuestros objetivos futuros bajo los mismos objetivos del discurso de la segunda modernización que plasmó días atrás el presidente Chaves en el debate de la comunidad", dijo González Cabaña, quien sustituye al también socialista Rafael Román, que ha presidido la Diputación gaditana los últimos ocho años. Román recibió la mayor ovación del acto cuando juró su cargo como diputado.
Nuevas tecnologías
El proyecto político de Francisco González Cabaña pivotará, según dijo, sobre tres ejes que coinciden con las ideas principales de la Segunda Modernización. Creará un área específica para "conseguir avanzar en la sociedad de la información" e implantar las nuevas tecnologías en todos los municipios gaditanos. Asimismo, la Diputación "potenciará" las políticas sociales con actuaciones especiales que tiendan a favorecer la igualdad de la mujer. Y apostará por una "potente" gestión de vivienda y suelo, en colaboración con los ayuntamientos, para permitir el acceso de las clases más desfavorecidas y los jóvenes a la primera vivienda. Cabaña anunció también que, en breve, creará una comisión integrada por todas las fuerzas políticas para estudiar la reforma del reglamento interno de la Diputación.
Los portavoces del PA, Hermenegildo González, y de IP, Hernán Díaz Cortés, defendieron la "transparencia" del pacto. No compartió esta idea la portavoz del PP, Patricia Ibarra, quien instó al nuevo gobierno a adoptar "una actitud beligerante y no sumisa" frente a otras administraciones públicas, como la Junta. El discurso más ácido lo pronunció la portavoz del PSA, Antonia Asensio, quien tildó el pacto de "ilegitimo".
