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Columna
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Trabaja, pero seguro

Chiqui de la Fuente

PARA UNOS MÁS, para otros menos, pero el hecho claro es que el ordenador se ha convertido en una pieza muy importante para el quehacer diario de la mayoría de la gente. Ya sea porque el trabajo así lo exige, ya sea porque, con gusto, se utiliza en los momentos de ocio. Este electrodoméstico se ha convertido ya en un elemento imprescindible en casi todos los hogares españoles.

Como se pasan muchas horas, en algunos casos demasiadas, delante del monitor, nada más útil para el usuario que adoptar la posición adecuada delante de él. Adoptar ciertas costumbres saludables a la hora de trabajar con la máquina puede ahorrar a largo plazo muchos problemas, algunos incluso muy importantes para la salud.

Tres son las partes del cuerpo que más sufren cuando se está más horas de las recomendables delante de un ordenador: la espalda, la vista y las muñecas. Tan sólo teniendo en cuenta algunos pequeños detalles y tomando pequeñas precauciones, se puede ayudar a mejorar el hábito.

En lo que se refiere a la vista, es imprescindible dejarla descansar cada cierto tiempo, haciendo breves pausas en el trabajo para así relajar el sistema visual. Fijar la mirada en puntos alejados o cerrar por un momento los ojos favorece el descanso y evita innecesarios dolores de cabeza.

También hay que organizar el lugar de trabajo y la pantalla de manera que las luces brillantes (ventanas, puntos de luz...) no se reflejen en la pantalla. El monitor del ordenador debe situarse siempre a unos 40 o 60 centímetros del ojo y con una inclinación de 3 a 5 grados; esto es, hay que procurar que la vista esté siempre un poco por encima de la pantalla.

En lo que a la espalda se refiere, una mala postura originará la aparición de problemas, tanto musculares como de huesos. Para adquirir la postura idónea se debe apoyar la espalda totalmente en el respaldo. Nunca hay que sentarse en el borde de la silla con la espalda suelta, sin apoyar. Sería ideal que la silla fuera regulable no sólo en altura, sino también en la inclinación del respaldo. Es recomendable utilizar un reposapiés (una caja de zapatos o un par de guías telefónicas pueden valer). Favorecer la movilidad y disponer de espacio para poder mover las piernas y así variar la forma de sentarse cada cierto tiempo es altamente aconsejable (eso cuando sea posible).

Por último, y para las muñecas, adoptar delante del teclado o el ratón una posición natural y distendida es imprescindible. Es muy recomendable disponer de un espacio, aunque sea pequeño, entre el teclado y el final de la mesa para que puedan descansar las muñecas. Es bueno ayudarse de reposamuñecas acopladas al teclado. Otro detalle importante es que se debe utilizar todo el brazo para mover el ratón, y no sólo la muñeca.

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Sobre la firma

Chiqui de la Fuente
Es responsable de Formación de Redacción y ha desarrollado toda su carrera profesional en EL PAÍS en diversos departamentos: Nuevas Tecnologías, Confección, sistemas editoriales... Es autor del blog Publizia y tiene una perra que se llama Rosca.

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