Unos desconocidos derriban el último 'toro' de Osborne de Cataluña
El último toro de Osborne que hay en Cataluña, situado junto a la autovía de la N-II en El Bruc, apareció ayer derribado. Durante la noche del martes, unos desconocidos serraron las patas en las que se asienta la conocida silueta del toro, que tiene 14 metros de altura y una superficie de más de 200 metros cuadrados de chapa negra. No es la primera vez que se atenta contra este toro. El pasado 12 de octubre fue derribado con un soplete, en la última diada de Sant Jordi apareció pintado con los colores de la bandera catalana y hace unos meses lo pintaron con manchas blancas como si fuera una vaca. Como en las anteriores ocasiones, nadie ha reivindicado la acción.
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