Un informe de Medio Ambiente alerta del riesgo de vertidos contaminantes en las costas andaluzas

El Informe Medioambiental de Andalucía 2002 alerta del alto riesgo de que en las costas andaluzas se produzcan accidentes marítimos "que provoquen graves episodios de contaminación marina". La situación, según el documento presentado ayer por la viceconsejera de Medio Ambiente, Isabel Mateos, es especialmente preocupante en la bahía de Algeciras, en aguas jurisdiccionales de Gibraltar, donde es habitual el repostaje del combustible de buques en tránsito "motivados por su menor precio".

Según el informe, esta circunstancia provoca "multitud de derrames contaminantes" en la costa algecireña. Entre 2000 y 2001, advierte el estudio, se registraron al menos 44 vertidos, "muchos de los cuales llegan a las playas gaditanas y malagueñas". El documento recuerda que la Junta ha denunciado en reiteradas ocasiones esta toma de avituallamiento, que está prohibida por la Capitanía Marítima de Algeciras, a pesar de lo cual el puerto gibraltareño sigue siendo el primero del Mediterráneo en estas operaciones: en 2001 se suministraron 3,5 millones de toneladas a 6.000 buques.

El informe considera también "inadmisible" que en 2001 sólo se inspeccionaran 2 de los 6.650 buques que atracaron o fondearon en aguas de Gibraltar. Asimismo, sostiene que el dispositivo de la Administración Central para prevenir estos riesgos es "casi nulo". La Consejería lamenta que la Capitanía Marítima de Algeciras, "aún siendo una de las de mayor tráfico del continente", sólo cuente con un inspector de buques, lo que sólo permite que se inspecciones el 25% de los buques que atracan o fondean en estas aguas.

La Junta se queja también de que no exista ningún puerto de refugio en Andalucía, así como del alto número de buques con bandera de conveniencia, aquellos que pertenecen a países que ofrecen un sistema impositivo favorable y que, según advierte la Consejería, "tienen pocos requerimientos normativos tanto para la seguridad marítima como para los derechos laborales". Éste es el caso de países como Panamá, Liberia, Bahamas, Malta o Chipre. Según el informe medioambiental, el 17% del tráfico marino de los puertos andaluces en 2001 correspondió a buques de estos países.

El estudio sobre la contaminación marítima producida por los buques es una de las tres monografías del último informe de la Consejería. Los otros dos estudios corresponden a las repercusiones ambientales de la ley de Ordenación Urbanística de Andalucía y al análisis de las claves de la segunda modernización aplicada al medio ambiente. Además, según explicó el director general de Planificación de la Consejería, Rafael Silva, el informe refleja avances "espectaculares" en el tratamiento de los residuos sólidos urbanos, mientras que alerta del incremento de la contaminación acústica, producida casi en un 80% por el tráfico terrestre.