Francisco Camps, elegido presidente de la Generalitat valenciana

El candidato del PP Francisco Camps fue proclamado ayer presidente de la Generalitat valenciana con los 48 votos de su partido, frente a 35 del PSPV (faltó uno de sus diputados) y cinco de L'Entesa. En su discurso de investidura, que fue el más breve y el de mayor intensidad valencianista de la historia de las Cortes valencianas, Camps esbozó su programa de gobierno, que calificó de "ambicioso, coherente, centrado en las personas, moderado, tolerante y solidario", y, sobre todo, encaminado al reto de situar a la Comunidad Valenciana "entre las regiones de cabeza de la Europa del siglo XXI".

Camps insistió en ser el primer presidente de la Generalitat valenciana surgido de unas elecciones del siglo XXI, enumeró los desafíos que esta nueva época plantea a los valencianos y habló "del siguiente escenario", en una clara intención de distanciarse de la etapa encarnada por su antecesor, Eduardo Zaplana. Asimismo, y a diferencia de las dos legislaturas anteriores en las que el PP apostó por los grandes proyectos, Camps fijó su objetivo en la creación de condiciones para incentivar la economía productiva, mejorar la competitividad y facilitar la internacionalización de los sectores. En ese punto consideró primordiales las infraestructuras (Plan Hidrológico Nacional, AVE, puertos, suelo industrial y nuevas tecnologías de comunicación), para lo que ha decidido agrupar en un solo departamento la Consejería de Infraestructuras y Transporte.

Camps también habló de reformar el Estatuto de Autonomía. Lo justificó en que esta comunidad, ni administrativa ni económicamente, "ya no es aquélla que inició su andadura hace 20 años". Consideró oportuno plantear esta reforma desde el primer momento de la legislatura, "no haciendo de los mecanismos su esencia sino hablando de modelos", del mismo modo que planteó una reforma del funcionamiento de la Cámara para hacer de las Cortes valencianas "la referencia inexcusable para el debate". En ese sentido, se comprometió a comparecer en el Parlamento todas las semanas, al contrario que Zaplana, que sólo lo hacía una vez al mes y no siempre.

Debut de Pla

El socialista Joan Ignasi Pla, que se estrenó ayer como jefe de la oposición, emplazó a Camps a no repetir "esquemas y actuaciones del pasado" y le planteó la posibilidad de alcanzar acuerdos "en temas de Estado". También le recriminó que en su discurso se olvidase de problemas muy candentes como son la deuda y la inminente privatización de Canal 9. El portavoz socialista terminó su discurso refiriéndose a los "tres grandes pilares en las políticas del Estado del Bienestar", educación, sanidad y políticas sociales, y donde "el Gobierno del PP ha reducido la calidad de estos servicios".

El portavoz de L'Entesa, Joan Ribó, se mostró preocupado por la "ausencia de ética" en la política y reclamó una gestión "honesta y transparente". Y acusó a Camps de abandonar los servicios públicos y de presentar una realidad virtual de la Comunidad Valenciana.