La presión urbanística amenaza el suelo fértil del litoral de Alicante

El clima seco y las fuertes lluvias torrenciales han convertido la Comunidad Valenciana, sobre todo la provincia de Alicante, en la zona más afectada de Europa por la desertización. Ramón Vallejo, miembro del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), criticó ayer la sobreexplotación urbanística en el litoral ya que, según él, amenaza el suelo agrícola en zona fértil.

La saturación a la que se ha sometido el terreno de la provincia de Alicante durante siglos, y su peculiar climatología, con frecuentes episodios de lluvias torrenciales, son los factores que le han convertido en una de las áreas de Europa más afectadas por la desertización. Los incendios también han contribuido a la actual situación, según los expertos.

Para prevenir este proceso de erosión, la Unión Europea ha organizado el congreso Medidas de Prevención y Restauración en la lucha contra la desertización, que se celebra en la sede de la Universidad de Alicante hasta el lunes. En la cita participan más de un centenar de expertos.

El jefe del programa forestal del CEAM consideró que el avance de las construcciones, sobre todo en el litoral, pone en riesgo la desaparición de suelos agrícolas muy fértiles. Sin embargo, la tendencia, según el experto, es "a mejorar". Vallejo explica que la población depende menos de los recursos naturales. Además, prosigue, la disminución de la explotación agraria y ganadera contribuye también a la mejora del diagnóstico.

El experto consideró que el territorio está mucho menos degradado que hace cien años. "La peor situación se alcanzó a finales del XIX y principios del siglo XX", dijo.

Durante el congreso se presentará un proyecto piloto sobre cómo recuperar Albatera (Vega Baja), uno de los ejemplos más claros de erosión.