El PSOE gobernará Estepona con ex ediles del GIL que tienen causas pendientes en los tribunales

PSOE, IU y Partido Estepona (PES), del que forman parte ex concejales del Grupo Independiente Liberal que tienen causa pendiente con la justicia por su gestión, suscribieron ayer un acuerdo de gobierno que dará la alcaldía de la ciudad malagueña al socialista Antonio Barrientos. La dirección provincial del PP abortó un principio de acuerdo entre sus concejales en Benalmádena con PSOE e IU para arrebatar la alcaldía al independiente Enrique Bolín, y en Vélez Málaga los partidos han acordado respetar la lista más votada, lo que permitirá una nueva investidura del socialista Antonio Souvirón.

El pacto en Estepona se cerró una vez que los tres grupos aceptaron las condiciones puestas el jueves por la dirección regional del PSOE para dar vía libre al acuerdo: que el PES no obtenga la gestión del Urbanismo y que los dos representantes que corresponden a la ciudad en la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental sean para PSOE e IU. Esto permitirá además con toda probabilidad a los dos partidos de izquierda arrebatar al PP la presidencia de este organismo, al que pertenecen 11 municipios, pues suman 12 de los 22 miembros del consejo.

El acuerdo contempla que el socialista Antonio Barrientos, que hoy será investido alcalde, ocupe la concejalía de Urbanismo, y aunque en un primer momento informó de que la gerencia sería para el PES, la dirección del partido matizó por la tarde que lo que existe es un acuerdo de representatividad de todos los grupos en el consejo y que en todo caso el gerente es un cargo técnico que nombrará el alcalde.

Con este acuerdo, el PSOE convierte en sus socios de gobierno a tres ex concejales del GIL -de los cuatro del PES- que están implicados en procesos judiciales por su gestión entre 1995 y 1999, en uno de ellos un presunto delito urbanístico denunciado por el propio Partido Socialista. Además, los concejales ex gilistas cobraron del Ayuntamiento de Estepona determinadas cantidades de dinero sin la suficiente justificación, según consta en un informe de fiscalización de la Cámara de Cuentas de Andalucía.

El PP arremetió ayer contra la el PSOE por este pacto, y, según el presidente provincial, Joaquín Ramírez, "los socialistas están convalidando la moción de censura que nosotros presentamos y que tanto nos criticaron". En 1999, PSOE, PP, IU y PA firmaron un acuerdo para arrebatar la alcaldía a Jesús Gil Marín, pero en octubre de 2001 el PP pactó con un grupo de ex concejales gilistas que se afiliaron al PP y derrocaron a Barrientos mediante una moción de censura. Ramírez expresó también sus sospechas sobre los contenidos del acuerdo, porque dijo que PP y PES estaban muy cercanos a alcanzar un acuerdo pero que al final "el PSOE les ha ofrecido mucho más". La dirección socialista insistió ayer en que estará "muy vigilante" sobre las actuaciones del gobierno municipal en Estepona e insistió en que el PSOE tiene ahora la oportunidad de demostrar que hay una alternativa al urbanismo voraz que se practica en la Costa del Sol.

Los partidos políticos vivieron ayer una frenética jornada de negociaciones para cerrar la composición de gobiernos municipales en la provincia de Málaga. En Benalmádena, la dirección provincial del PP tuvo que emplearse a fondo para abortar un principio de acuerdo al que habían llegado sus concejales con el PSOE e IU para arrebatar la alcaldía a Enrique Bolín. El acuerdo incluía un turno rotatorio en la alcaldía, los dos primeros años para el PP y los dos últimos para el PSOE, partido que tendría además la concejalía de Urbanismo los cuatro años.

Finalmente, el PP, que tiene una oferta de Bolín para formar parte de su gobierno, votará hoy a su propio candidato para permitir la investidura de Bolín. "No teníamos elementos de juicio suficiente para justificar un pacto así contra la lista más votada en Benalmádena", explicó Ramírez.

En Vélez Málaga, el socialista Antonio Souvirón no cerró del todo el acuerdo con el PA, que en esa comarca se presentó a las elecciones en coalición con el Grupo Independiente Pro Municipio de Torre del Mar, pero existe un acuerdo para que cada partido vote a su propio candidatos, lo que garantiza la tercera investidura consecutiva de Souvirón.

También en Málaga habrá algunos incumplimientos al acuerdo global entre PSOE e IU. En Campillos, donde el PSOE fue la fuerza más votada, IU gobernará con el apoyo del PP, y en Benamocarra ha pactado con el PA. Los socialistas por el contrario no permitirá un alcalde de IU en Alfarnate y han pactado el apoyo del PA en Torrox.

En Gaucín, un concejal del PSOE ha decidido romper el acuerdo con el PP para arrebatar la alcaldía al PA, cuyo candidato y alcalde en funciones, Francisco Corbacho, fue expulsado del PSOE hace un año al verse implicado en un caso de apropiación indebida de fondos del PER.