El GIL saca mayoría absoluta en Marbella pese a la inhabilitación de su jefe
Jesús Gil se va del Atlético de Madrid, pero su partido no se marcha del Ayuntamiento de Marbella. La ausencia de su jefe de la candidatura, por la inhabilitación a la que fue condenado por el Tribunal Supremo, no evitó ayer la cuarta mayoría absoluta consecutiva del Grupo Independiente Liberal (GIL) en esta localidad, que gobierna desde 1991. Aunque por primera vez esta candidatura no obtiene más de la mitad de los votos. Cuando iba escrutado el 99,06%, el GIL sumaba el 47,11%.
Al candidato gilista, Julián Muñoz, no parece haberle erosionado en absoluto el culebrón publicado en toda la prensa rosa en el último mes, con su separación matrimonial y una presunta relación sentimental con una famosa tonadillera. Anoche Gil calificó esta cuarta mayoría absoluta como "un hecho histórico, porque el pueblo no ha tenido en cuenta cosas raras que han pasado". Julián Muñoz dijo que la victoria "es una lección de democracia y a la democracia". A medianoche, la plana mayor del GIL se fue a celebrar su triunfo a una sala de fiestas de San Pedro.
Marbella, por el aumento del censo, tenía en esta ocasión dos concejales más. Ha pasado de 25 a 27. Estos dos ediles han sido para el PP y el PA. El GIL, con 15, y el PSOE, con 5 concejales mantienen sus posiciones. El PP ha sacado 4 ediles y el PA, 2. La candidata del PSOE, Isabel García Marcos, se mostraba anoche profundamente decepcionada y consideró los resultados de su candidatura como "un fracaso rotundo, sin paliativos". La portavoz socialista, que ha presentado numerosas denuncias por corrupción contra el equipo de gobierno del GIL, no se consideraba capaz de analizar las causas de este fracaso, pero insinuó que anoche había acabado una etapa.
Por su parte, Ángeles Muñoz, candidata del PP, no quiso mostrarse decepcionada con los resultados: "Seguiremos trabajando otros cuatros años, para demostrar a esta ciudad que las cosas se pueden hacer de otra manera". Muñoz insistió en que "ha habido mucha manipulación desde los medios públicos que maneja el GIL y es muy difícil luchar contra eso; pero no es imposible y lo demostraremos en el futuro".
