Tarantino transforma a Daryl Hannah en samurái en 'Kill Bill'

El silencio cinematográfico que ha mantenido Quentin Tarantino durante más de seis años está a punto de romperse. La fecha prevista es octubre de 2003 y el nombre de su nuevo filme, Kill Bill. La actriz Daryl Hannah (Chicago, 1960) habló ayer en Barcelona sobre este nuevo trabajo que protagoniza Uma Thurman y en el que ella participa interpretando a una "malévola samurái". Hannah aseguró sobre esta película, en la que compone el trío de "los malos" junto a Lucy Liu y David Carradine, que ha sido un trabajo divertido del que saldrá una obra "sorprendente, ya que realiza una mezcla extraña de artes marciales, western y animación japonesa". El filme tiene un presupuesto de 45 millones de dólares y cuenta con el asesoramiento en artes marciales de Yuen Wo-Ping, el maestro encargado con anterioridad de, entre otras, The Matrix.

"Ha sido una experiencia muy positiva. Tarantino me propuso el papel precisamente mientras rodaba en Madrid Casa de los Babys", comentaba la actriz, que se encuentra en Barcelona para ser la imagen de una campaña promocional de la cadena de alimentos congelados La Sirena. Y es que Hannah no acaba de desprenderse de las escamas de su cola de sirena en 1, 2, 3, Splah. "No me molesta que éste sea el recuerdo que tenga el público sobre mí. Me gusta una película como ésta con elementos mitológicos y hecha para ser vista en familia", dijo tras sortear preguntas sobre sus parejas anteriores, la dieta que sigue o sobre si prefiere los hombres "calientes o congelados". Ante el ritmo que tomaba la rueda de prensa, anunció con una sonrisa a los asistentes que se considera una mujer "tímida y reservada" y que lo que más odia "es que me tomen fotos".

La actriz lleva un ritmo imparable, durante 2003 ha trabajado en el rodaje de cuatro largometrajes: el último filme de Tarantino; Casa de los babys, de John Sayles; The big empty, de Steve Anderson, y The job, de Kenny Golde. El resultado dice que ha sido lo suficientemente interesante como para sentirse contenta por cómo evoluciona su carrera en una industria del cine "en la que escasean los papeles buenos para las actrices, aunque yo he tenido suerte".

Tal vez porque teman a la falta de trabajo tras participar en medio centenar de películas, la replicante Pris de Blade Runner se prepara ahora para pasar al otro lado y rodar su primer largometraje como directora. "Adoro actuar, pero cada vez me siento más atraída por el trabajo que hay detrás de las cámaras, creo que es mucho más creativo, que da nuevas posibilidades de expresarte", comentó. Hannah anunció así que el próximo verano dirigirá su primer largometraje de ficción después de estrenarse tras las cámaras en 2001 con el documental Strip notes.