"Barberá practica una política de postal"

Concejal desde 1996, Rafael Rubio fue proclamado candidato socialista a alcalde de Valencia hace menos de un año al ganar las elecciones primarias a la anterior portavoz del grupo municipal, Ana Noguera.

P. ¿Cómo contrarresta la popularidad de su contrincante del PP?

R. Estamos luchando contra un mito falso, que es el mito Barberá. Ella ha sacado en Valencia casi los mismos votos que su partido en otras elecciones, generales o europeas en las que no ha concurrido como candidata. Aún reconociendo que es cierta la popularidad de Barberá, no es imbatible.

P. ¿Qué resultado electoral espera?

R. El resultado óptimo sería ganar, es a lo que salimos. Cualquier otra fórmula que suponga un cambio de mayorías en la ciudad también sería un buen resultado. Estamos en una situación de recuperación importante, y eso se notará.

P. ¿Qué proyecto concreto propone a los valencianos?

R. Hacer compatible la vida laboral con la familiar, con la apertura de los centros escolares públicos de siete de la mañana a siete de la tarde de lunes a sábado, y gratuidad de los libros de texto de todos los escolares de la enseñanza obligatoria al acabar el mandato. También planteamos construir un parque público de 1.000 viviendas de una superficie media de 60 metros cuadrados a un precio máximo de alquiler de 150 euros al mes. Además, esta ciudad sólo tiene una residencia pública para personas mayores con discapacidades, y planteamos construir 10 nuevas residencias y centros de día.

P. ¿Qué papel debe asumir Valencia como tercera capital española en habitantes?

R. Tenemos que desempeñar un papel clave en el arco mediterráneo. Podemos ser un eje básico del desarrollo económico de ese arco español y europeo, con un papel activo.

P. Unas declaraciones durante la guerra de Irak sobre el cáncer que padeció la ministra Ana Palacio le valieron fuertes protestas.

R. Pude tener un exceso verbal, rectifiqué y le pedí disculpas personalmente, y a todo el que pudiera sentirse aludido. Pero sigo pensando que es la peor ministra de Exteriores que ha tenido España y que sus declaraciones justificando la guerra son mucho más fuertes que otras cosas que se hayan dicho.

P. ¿Qué planes tiene para frenar el aumento de la delincuencia?

R. Entre 1995 y 2002 se ha multiplicado por dos el número de delitos en Valencia, y es evidente que el equipo de gobierno no ha actuado. Nosotros tenemos una opción clara: duros con la delincuencia, más duros con las causas que la generan. Por tanto, hay que trabajar en programas de prevención, aumentar las plantillas policiales, y modificar la estructura de la policía de barrio.

P. ¿En qué ha avanzado Valencia con el PP?

R. Que Valencia ha ido cambiando yo no lo pongo en duda. Ahora bien, Barberá practica una política de postal, en la que se gasta más en cambiar las plantas de un puente que en ayudas a la asociación de enfermos de Alzheimer. Hay que ver que detrás de esa postal está la gente, y que cuando tiene problemas relacionados con el empleo, la sanidad, la seguridad ciudadana, algo falla. Y ésa es la situación.

P. ¿Con qué medida se estrenaría como alcalde?

R. Me pondría a trabajar rápidamente para que a ser posible al comienzo del curso escolar los niños tuvieran los libros gratis.