El nuevo mapa electoral vasco

Las elecciones del 25-M van a tener algunas consecuencias notables. Por ejemplo, van a dar origen a un nuevo mapa electoral en el País Vasco. Pase lo que pase en las urnas, una cosa está clara: el día 26 habrá desaparecido de cuajo una de las cuatro fuerzas políticas con que contaba Euskadi hasta ahora. HB, la coalición-partido con la que los españoles llevamos viviendo prácticamente desde la democracia, será borrada de los ayuntamientos, como paso previo a su desaparición de todos los Parlamentos. Poco importa si el PNV concede a algunos ex concejales algunas plazas de simple "staff" en los ayuntamientos que domine. Lo importante es que HB (o como se llame ahora) ya no controlará los pueblos, que habrá perdido uno de sus instrumentos más poderosos, la vida municipal, y que ETA tendrá que tener en cuenta esa nueva situación. Empieza una etapa nueva. Será como sea, pero será nueva.

Mayor, el político más famoso del PP, da la impresión ahora de tener poco interés en la candidatura

Uno de los mayores impulsores de este escenario ha sido, sin duda, Jaime Mayor Oreja. El vicesecretario del PP es uno de los tres teóricos sucesores de José María Aznar como candidato a la presidencia del Gobierno. Es el político popular más conocido en toda España y nunca ha dicho que renuncie a heredar a Aznar. Algunos de sus colaboradores insisten, bien al contrario, que está en la carrera a La Moncloa.

Sin embargo, en esta campaña parece claro que Mayor Oreja es un político absolutamente identificado con el País Vasco y que no hace apenas incursiones en otros campos. Comparándole con sus posibles competidores, Mariano Rajoy y Rodrigo Rato, que hablan sin remilgos de economía, seguridad ciudadana, terrorismo o política internacional, Mayor es el que más da la sensación de haber renunciado a la famosa candidatura.

Mayor Oreja está estos días completamente absorto en la política vasca, aunque haya hecho y tenga aún previstas algunas visitas a otras zonas de España. Su actividad primordial se desarrolla, como es lógico, en Euskadi y tiene unos rasgos muy peculiares porque le está absolutamente prohibido acudir a actos multitudinarios que no puedan ser concienzudamente controlados. En su caso, todas las medidas de precaución son, realmente, pocas. Su pequeña caravana se desplaza como un auténtico rayo por autopistas y carreteras del País Vasco, al encuentro de pequeñas citas con militantes de su partido, y fundamentalmente de la ocasión para hacer "pasar", en radios y televisiones, su mensaje de ese día.

En la ermita de Gerediaga, a la salida de Durango, Jaime Mayor desmenuza su análisis: el nacionalismo vasco, afirma, tenía dos instrumentos, el PNV y HB, y dos proyectos. Ahora tiene un único instrumento, el PNV, y un solo proyecto, el de HB. El nacionalismo vasco, que fue la causa, origen y promotor del Estado de las autonomías en España, es ahora, según él, su destructor.

Mayor Oreja no cree, de verdad, que exista un pacto expreso entre el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y ETA. Pero afirma que sus relaciones son un "proceso abierto" que no se sabe cómo va a terminar. "La prueba del nueve (una manera algo antigua de denominar lo que los jóvenes de hoy llamarían la prueba del algodón) llegará cuando los diputados de HB tengan que votar el Plan Ibarretxe en el Parlamento de Vitoria. Entonces veremos que hacen HB y ETA".

Para el político popular, PNV y ETA mantienen un juego inestable, que se puede romper. Mayor se muestra escéptico sobre el alcance del voto nulo que pide ETA en estas elecciones. "Veremos cuántos hay de verdad. Quizás muchos menos de los que creen. A la hora de la verdad, es posible que elijan otras papeletas".

A Mayor Oreja le extrañó un poco la rapidez con la que ETA hizo público su vídeo, corrigiendo, según él, el comunicado anterior. Pero no le gusta comentar los posibles temas internos de la organización terrorista. ¿Por qué cree que HB se ha empeñado en mantener a candidatos tan conocidos en las listas electorales y no incorporó a gente completamente nueva a fin de que los tribunales no pudieran descalificar sus listas? "Quizás", aventura Mayor, "porque no podía garantizar el control absoluto posterior de esa otra gente y no le merecía el riesgo".

A Mayor le irrita que se pretenda colocar un segundo tipo de terrorismo, el terrorismo internacional, en el centro de las discusiones de esta campaña municipal y autonómica. Pero por mucho que diga, parece muy dificil que el Gobierno y el PP logren sustraer el debate sobre la participación española en la ocupación militar de Irak. El terrible atentado de Casablanca ha puesto de manifiesto que no se trata de una acción fortuita, sino que los intereses españoles han pasado a ser claro objetivo. Ése es un escenario que los ciudadanos no habían analizado mucho durante la guerra y que en estos últimos seis días pasa a primer plano. España, más aún que Marruecos, tiene un poderoso sector turístico que necesita tranquilidad para su normal desarrollo y no es irracional que algunos empresarios ya hayan comunicado al Gobierno su escalofrío.