Las constructoras retoman el paseo de Gràcia para edificar viviendas de lujo

Primero fueron las tiendas y las boutiques de lujo; ahora son los promotores de viviendas los que se han fijado en el barcelonés paseo de Gràcia para construir viviendas. Las empresas que las promueven dicen que el precio de venta se sitúa en torno a 7.000 euros el metro cuadrado, y que se venden rápidamente. Los compradores son profesionales y empresarios; algunos de ellos vivían fuera de Barcelona y ahora regresan al centro de la ciudad.

Cinco empresas construyen o han acabado ya casi un centenar de viviendas en el paseo de Gràcia. Los pisos tienen entre 150 y 370 metros cuadrados de superficie y los apartamentos, de 40 a 90. La mayoría de los edificios eran antes inmuebles de oficinas o casas que han sido totalmente reformadas.

Los precios que se pagan no bajan de 6.000 euros por metro cuadrado. De media, rondan los 7.000 euros, como sucede en una promoción de viviendas que realiza la firma Trópolis en el cruce de la calle de Aragó con el paseo de Gràcia, donde se ha rehabilitado un edificio que antiguamente albergó oficinas. En esta zona se han llegado a pagar precios de más de 9.000 euros el metro cuadrado. Una vivienda de 200 metros cuadrados de las que se están construyendo cuesta en torno a 1,5 millones de euros y el precio de un apartamento de 50 metros ronda los 360.000 euros.

Profesionales jóvenes

"La mayor parte de los compradores son profesionales o empresarios de 30 a 50 años que quieren vivir en el centro de la ciudad", dice un directivo de la firma Trópolis. "Algunos salieron de la ciudad hace 10 o 15 años y ahora quieren volver", afirma Roberto Bordanove, director de KM2. "Los que vienen aquí eligen vivir en la zona muy comercial y junto a los edificios modernistas, aunque a veces escasean las plazas de aparcamiento", dice otro promotor.

La inmobiliaria Bami ha sido la última gran empresa que ha desembarcado en el paseo de Gràcia. Tras comprar el inmueble donde estaba instalada la librería Francesa, edificará 14 viviendas de lujo que tendrán entre 180 y 370 metros cuadrados y se venderán a un precio medio de 1,3 millones de euros. Vallehermoso fue la primera empresa que hace dos años se lanzó a construir pisos en el paseo de Gràcia, a la altura de la calle de Mallorca. Tienen entre 75 y 300 metros cuadrados y están todos vendidos desde hace meses, informa la firma.

En la parte alta de paseo de Gràcia, por encima de la avenida Diagonal, la comercializadora Tasinsa y la promotora KM2 rehabilitarán dos bloques de viviendas, para vender y alquilar pisos, algunos a 1.200 euros mensuales.Pese a los altísimos precios que se pagan en el paseo de Gràcia por estas viviendas de lujo, las empresas inmobiliarias afirman que los bajos tipos de interés favorecen las compras. Un crédito hipotecario a 20 años al 3,125% de interés supone pagar 56 euros (9.332 pesetas) por cada 10.000 euros tomados en préstamo. Si el comprador se endeuda en 600.000 euros pagará 3.365 euros al mes (560.000 pesetas). El temor a un pinchazo inmobiliario, que se anuncia desde hace dos años, no asusta a los promotores, que creen que sólo ocurrirá una bajada en la demanda si se produce una brusca subida de los tipos de interés, algo, esto último, que por ahora nadie prevé debido a la extrema debilidad de la economía europea y a la fortaleza del euro.

Salvadas todas las distancias, la construcción de nuevos pisos en el paseo de Gràcia rememora lo que era la avenida en sus inicios, en el último tramo del siglo XIX y los primeros años del XX. Esta emblemática vía albergaba entonces tiendas, cafés y casas para la burguesía y conectaba hacia el este con la ciudad vieja y hacia el oeste con Gràcia, entonces un municipio que no se integró en Barcelona hasta 1897.

Eran los años del modernismo, cuando se empezaron a construir algunas de las casas características del paseo: casa Amatller (1898); casa Lleó Morera (1903); casa Batlló (1904); casa Milá, La Pedrera (1906).

Si los pisos están en auge en la avenida, las oficinas están en retroceso en esta zona, sobre todo las de las empresas. En varios inmuebles de la avenida cuelgan letreros de "se alquilan oficinas". Se mantienen, en cambio, los despachos de los profesionales, señalan fuentes del sector.

Aunque en Barcelona el precio de las oficinas ha bajado alrededor del 15% en el último año, en el centro de la ciudad los precios resisten mejor y la caída no supera el 10%. El motivo del descenso es tanto el exceso de oferta como el hecho de que los nuevos parques de oficinas que se han construido en la periferia de Barcelona ofrecen precios mucho más reducidos, según aseguran las fuentes del sector consultadas.