Bruselas exige a París que intente frenar su déficit antes de octubre

La Comisión Europea no prevé dejar una sola oportunidad para presionar al Gobierno francés con el fin de que cumpla el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que fija en el 3% del PIB el límite máximo de los déficit públicos. Ayer, el Ejecutivo comunitario constató que Francia tiene ya un "déficit público excesivo", el 3,1% en 2002, pero, lo que es peor, recordó que probablemente este año llegue al 3,7% y supere el 60% de deuda. Por eso, exigió a París que "antes del 3 de octubre" próximo adopte "las medidas necesarias" para frenar ese deterioro de las finanzas públicas, de forma que, "a más tardar en 2004", no exista ese exceso.

Con esas advertencias, Bruselas hace frente de nuevo a los argumentos de Francis Mer, el polémico ministro francés de Finanzas, quien cuestiona la recomendación de la Comisión de que los países con elevados desequilibrios presupuestarios rebajen sus déficit a un ritmo anual del 0,5% del PIB. Bruselas calificó ayer de "insuficiente" el esfuerzo francés durante este año. Mer sí se comprometió ayer a que el déficit francés esté por debajo del 3% el año que viene.

Pero la Comisión Europea ha querido dejar claras las razones por las que Francia ha entrado en tan peligrosa situación, sumándose así a Alemania y Portugal, los dos primeros países que sufrieron la apertura de procedimientos por déficit excesivo. El Ejecutivo comunitario afirma que Francia no ha sido víctima ni de "una recesión económica grave" (creció un 1,2% el año pasado) "ni de un acontecimiento excepcional que las autoridades francesas no hayan podido controlar", sino que el déficit obedece a "unos gastos que desbordaron las previsiones" y a la aplicación de reducciones fiscales.