Un responsable policial testifica que Rontealde admitió que había causado el escape

Los directivos de la empresa química Rontealde vieron ayer desmentida su versión de que no causaron el escape tóxico mortal de 1994 por el que son juzgados en la Audiencia de Vizcaya. En la segunda sesión del juicio, un cabo de la Policía Municipal de Barakaldo, que el día del escape, el 21 de octubre de aquel año, estaba a cargo del cuerpo, declaró ayer que el director de la planta, José Elizalde, le comentó en dos ocasiones que el arranque de la factoría había causado la contaminación, que motivó la muerte de un vecino de 70 años y problemas respiratorios a más de 20 personas.

El responsable policial fue quien primero avisó a los directivos de Rontealde del escape. En esa conversación, Elizalde -procesado con dos de sus directivos- le dijo que minutos antes habían iniciado el proceso de arranque de la planta. El cabo, quien dijo recordar "claramente" la conversación, agregó que Elizalde le repitió esta explicación cuando el director de Rontealde acudió poco después a la comisaría.

"Sabíamos que el escape procedía de Rontealde, porque no era la primera vez. Esa fábrica era un viejo problema en Barakaldo y con anterioridad también habíamos tenido que salir de casa con un pañuelo en la boca", añadió el agente. El cabo relató la alarma social creada, con miles de llamadas recibidas, incluida una "desde La Moncloa para interesarse".

El consejero delegado de Rontealde, Manuel Barrenechea, quien también fue procesado en este caso por el juzgado, pero cuya imputación retiró posteriormente la Audiencia, calificó de "falso" el testimonio del policía y, en la línea de los tres directivos imputados, afirmó que aquel día "todo funcionó perfectamente". Barrenechea afirmó desconocer, pese a que él firmó el protocolo de actuación, que la empresa debía avisar y consultar las condiciones climatológicas antes de cualquier arranque de la planta química.