Menem denuncia que hubo fraude electoral en la primera vuelta

Carlos Menem, ex presidente y candidato a las elecciones argentinas del próximo 18 de mayo, se disponía ayer a denunciar ante la juez federal María Servini de Cubría un supuesto fraude en la primera vuelta de los comicios del pasado 27 de abril. La denuncia tiene que ver con la presunta existencia de documentos de identidad falsos en La Matanza, el mayor distrito electoral de la provincia de Buenos Aires.

En esta localidad triunfó Néstor Kirchner, el candidato oficialista. El rival de Menem calificó las acusaciones de intento encubierto de golpe institucional. "En este país, cuando gana Menem está todo bien", dijo el candidato que cuenta con el respaldo del presidente Eduardo Duhalde. "Ahora, cuando pierde o no le salen las cosas como quiere, trata de ensuciar todo".

La campaña se calienta cuando apenas faltan 11 días para el día decisivo. Menem desmintió categóricamente las informaciones de ciertos medios políticos, empresariales y periodísticos que anunciaban una eventual retirada de la carrera electoral ante los malos presagios de las encuestas. "Es una maniobra del Gobierno, producto de la mala entraña", dijo el ex presidente. Adolfo Rodríguez Saá, candidato peronista derrotado en la primera vuelta que debate si apoya o no a Menem, ha sugerido al ex presidente que se retire de la carrera electoral si se comprueba que hubo fraude.

Todos los sondeos difundidos hasta ahora pronostican una victoria de Kirchner, atribuible en gran medida al rechazo que despierta en el electorado un eventual regreso de Menem para un tercer mandato. Nunca en su dilatada carrera política, el ex presidente ha conocido la derrota electoral. "No quiere pasar por esa experiencia", sostienen las fuentes que hablan de una retirada.

La estrategia de Kirchner y del Gobierno que le respalda es dar a Menem por derrotado, ante la avalancha de encuestas que apuntan una diferencia de hasta 40 puntos. Duhalde dijo ayer que tiene dos posibilidades: "Perder por abandono o por KO".

El ex presidente dio un golpe de timón el día después de la primera vuelta, tras comprobar que si bien fue el candidato más votado, apenas superó a su inmediato perseguidor por 2,3 puntos. Cambió algunas caras del equipo de campaña y del futuro equipo de gobierno, en un intento de transmitir una voluntad renovadora. En una carrera contrarreloj, la estrategia menemista persigue convertir la elección de la segunda vuelta en una nueva fase de la guerra interna peronista, en busca del electorado. Se trata de elegir entre dos candidatos peronistas, con los que no se identifica un mínimo del 40% de los votantes. En las actuales circunstancias, a Menem le conviene un aumento del sufragio nulo, en blanco y la abstención, porque representan a electores que en ningún caso le votarían.

La campaña electoral sufrió una tremenda sacudida la semana pasada con el secuestro de Florencia Macri, de 19 años, hija del empresario Franco Macri, representante de una de las familias más adineradas de Argentina. El lunes por la noche fue liberada en la zona oeste de la provincia de Buenos Aires después de seis días de cautiverio y previo pago de un rescate de 750.000 dólares. Se da la circunstancia de que Mauricio Macri, hermano de Florencia y actual presidente del club de fútbol Boca Juniors, también fue víctima de un secuestro en agosto de 1991. Tras pasar 14 días en poder de los captores, fue liberado en la localidad de Lomas de Zamora, en la provincia de Buenos Aires, cuyo gobernador era Eduardo Duhalde.