El museo de los liberales

Los desprevenidos que transitaban ayer a las once de la mañana por el centro de Granada, primer día hábil tras las procesiones de Semana Santa, fueron testigos del desfile de una pintoresca comitiva formada por los maceros municipales, los porteadores de un arcón de tamaño mediano con inscripciones doradas, la corporación municipal, presidida por el alcalde, José Moratalla, y una serie de personas vinculadas con el mundo de la cultura. No, no era una cofradía al uso, aunque a los circunstantes les unía un mismo fervor hacia una personalidad de la vida civil, Mariana Pineda, la mujer ajusticiada en 1831 por defender el ideario de los liberales.

Todos ellos habían sido convocados por la concejal de la Mujer, Asunción Jódar, para acompañar desde el Ayuntamiento a la casa donde fue detenida, en la calle Águila, a un tiro de piedra de la sede del PSOE, el arca que contuvo los restos de Mariana Pineda antes de su exhumación definitiva en una cripta de la Catedral de Granada.

La idea del desfile no tuvo la misma acogida entre todos los componentes del equipo de gobierno que, sin embargo, aceptaron finalmente acompañar en procesión la caja vacía los 500 metros que dista aproximadamente el Ayuntamiento de la casa museo. La oposición del Partido Popular no faltó a la cita. Una breve representación teatral con textos de García Lorca y Antonio Carvajal fue incluida en el acto.

Con todo, a nadie escapó ayer el esfuerzo hecho por Concejalía de la Mujer para permutar la vivienda, una casa con patio del siglo XVII totalmente arruinada, invertir en su reparación 378.000 euros y abrirla como museo y sede del Centro Europeo de Estudios de la Mujer. El arcón fúnebre que desfiló ayer por la ciudad es uno de los 200 objetos relacionados con la vida de Mariana Pineda y su tiempo que forman parte del museo abierto ayer y que ocupa la planta baja del inmueble.

Una sortija, un camisión y una manteleta, cedidos por herederos y admiradores, son algunos de los objetos personales distribuidos por los expositores del museo, además de una bandera republicana confeccionada por tres bordadoras del barrio del Albaicín. La enseña es una réplica de la que guardaba en su casa Mariana Pineda y que fue utilizada como prueba en el proceso que terminó con su ajusticiamiento público en las inmediaciones de los Jardines del Triunfo.

La historiadora y biógrafa Antonina Rodrigo ha donado la llave de la celda donde estuvo recluida antes de su muerte en el antiguo convento de Santa María Egipciaca, en la actual calle de Recogidas. También consta, entre otros objetos, un árbol genealógico cedido por Isabel Morcillo Esteban, descendiente de tercera generación, así como recordatorios, fotografías y un abanico de época.

La apertura del museo se enmarca dentro de una serie de actos en recuerdo a la popular heroína de Granada que, pese a sus simpatías liberales, mantuvo la plaza con su nombre durante la larga noche oscura del franquismo.

De aquí al 26 de mayo, fecha en que se constituirá formalmente el Centro Europeo de la Mujer, el Ayuntamiento ha preparado una serie de actos en memoria de Mariana Pineda en los que intervendrán, entre otros, los poetas Luis García Montero y Antonio Carvajal, Aitana Alberti, Antonina Rodrigo, Sara Baras y Cándida Martínez.