Ha fracasado, señor Pablo de los Santos
A punto de culminar su legislatura, he visto al teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevilla, Pablo de los Santos, cosechar un estrepitoso fracaso. Carrera popular Vivicittá 1999: participé gratis junto con otros 1.677 adultos.
En la edición de este año, Vivicittá 2003, éramos 288 y pagué 3 euros. Los niños, aunque gratis, otro tanto: 15 cadetes masculinos por 139 en 1999; o cadetes femeninos, sólo cinco niñas frente a 55 hace cuatro años. En su "saluda", señor Santos, donde destaca también sin recato alguno "PA 100%", nos dice que su "objetivo diario es enganchar al deporte a todos los sevillanos y con ello hacer una Sevilla sana, capaz de plantearse metas y alcanzarlas".
A la vista de los datos permítame decirle, con todo el respeto que se merece, que ha fracasado. Puede que haya otros objetivos y tal vez otros resultados, pero lo que viví en las calles de Triana-Los Remedios fue deprimente para el deporte popular sevillano.
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