Urbanismo aparca la adquisición del palacio de Correos, en Cibeles

El edil de Urbanismo, Ignacio del Río, no llevará al pleno de este mes el convenio de permuta del palacio de Comunicaciones, en Cibeles, por el edificio de las Cariátides, en la calle de Alcalá. El edil había diseñado esa operación para atender la propuesta del candidato del PP al Ayuntamiento, Alberto Ruiz-Gallardón, de llevar la alcaldía a Cibeles. Pero el alcalde o alcaldesa que salga elegido el 25 de mayo tendrá su despacho en la Casa de la Villa.

El concejal Del Río se puso a la labor de adquirir el edificio de Correos, en la plaza de Cibeles, para atender una de las ideas del equipo electoral de Alberto Ruiz-Gallardón: ubicar la alcaldía en uno de los lugares más emblemáticos de la capital, la plaza de Cibeles. La idea fue bien acogida por su oponente electoral, la socialista Trinidad Jiménez, que anunció su intención de instalarse en ese edificio de salir elegida alcaldesa.

Del Río diseñó en enero pasado una operación de intercambio de sedes institucionales y proyectó un convenio que quedaría aprobado antes de las elecciones del 25 de mayo. Básicamente, la operación consistía en adquirir para el patrimonio municipal el edificio de Correos, donde inicialmente estaba previsto instalar la nueva sede del Tribunal Constitucional. Como pago por ese inmueble, el Ayuntamiento tenía previsto entregar el edificio de las Cariátides, adquirido en diciembre de 2001 como sede de la Gerencia de Urbanismo, y otros inmuebles o terrenos donde ubicar a los 1.200 empleados de Correos y del Ministerio de Ciencia y Tecnología que hoy trabajan en el palacio de Comunicaciones. Tras el desalojo de ese inmueble de la plaza de Cibeles, en él se ubicaría la sede de la alcaldía, mientras que el Tribunal Constitucional encontraría acomodo en las Cariátides (antigua sede del banco SCH).

Críticas de IU

La operación fue cuestionada por la portavoz de IU, Inés Sabanés, que la consideró innecesaria para la gestión municipal. En opinión de Sabanés, antes de cerrar esa canje se deberían tener en cuenta los edificios que va a dejar libres el Ministerio de Defensa, fruto de la operación Campamento, y abogó por que una comisión evalúe las necesidades que tienen las tres administraciones (central, regional y autonómica).

Las críticas de IU coincidieron con las movilizaciones de los 1.200 empleados de Correos y Comunicaciones. Pero Del Río dio en varias ocasiones la operación por cerrada y anunció que el pleno de abril, último ordinario de esta legislatura, aprobaría la permuta de Cibeles por las Cariátides. Sin embargo, ese punto no está incluido en el orden del día de la comisión de Urbanismo previa al pleno. Del Río reconoció ayer que la adquisición del palacio ha quedado aparcada y atribuyó ese hecho a las dificultades para hallar un "equilibrio en las contraprestaciones que pide la Dirección General de Patrimonio, del Ministerio de Hacienda".

Patrimonio ha tasado el palacio de Comunicaciones en 360 millones de euros, según publicó ayer El Mundo. Mientras fuentes del Ayuntamiento aseguran que "no les consta que Hacienda haya valorado el edificio en esa cifra", Jiménez la considera "desorbitada".

Del Río afirmó, no obstante, que seguirá "hablando con Hacienda" y abogó por crear una comisión técnica para decidir el destino de los inmuebles oficiales disponibles en la capital. Sabanés afirmó ayer que se trata de una decisión de "sentido común". "No se puede actuar sin planificación y a impulsos. El reto que tiene planteado el Ayuntamiento es la descentralización y mejora de los servicios, acercándolos al ciudadano", dijo Sabanés.

La socialista Jiménez aseguró que "no renuncia a nada". "Estamos en condiciones, como Ayuntamiento de Madrid, de exigir o pedir que tengamos un edificio suficientemente representativo de nuestro protagonismo en el conjunto de España", declaró.