Un colegio de Córdoba rechaza la ubicación cercana de un centro de ayuda a toxicómanos

Los padres del colegio público San Juan de la Cruz, ubicado en el Sector Sur de Córdoba, no están dispuestos a que se instale junto al centro educativo una sala de ayuda a toxicómanos. Unos 300 padres se concentraron el pasado jueves en las puertas del centro educativo y el viernes decidieron llevar a sus hijos a las 9.30 horas, media hora más tarde del inicio habitual de las clases. Este centro de ayuda a toxicómanos que antes estaba ubicado en la calle Torremolinos, en la misma zona de la ciudad, estaba pendiente de una nueva sede.

La Casa de la Ciudadanía, en la que se agrupan 19 colectivos sociales, aprobó en una asamblea una propuesta de la Asociación de Ayuda al Toxicómano para que se ubicara el centro en la antigua Escuela de Magisterio. Este edificio es propiedad del Ayuntamiento, a quien se lo cedió la Universidad de Córdoba, y en una de sus siete plantas alberga la sede de la Casa de la Ciudadanía del Sector Sur.

Doce de los dieciseis colectivos presentes en la asamblea celebrada hace 10 días no plantearon objeciones a la propuesta, siempre que el Ayuntamiento diera el visto bueno a la implantación del centro y a la apertura de una entrada alternativa a la más cercana al colegio. Este acuerdo debía de ser remitido al Ayuntamiento cordobés para que diera luz verde al proyecto, pero a última hora de ayer, éste solicitó a los representantes de la Casa de la Ciudadanía que no presentaran la propuesta.

No obstante, los padres se muestran escépticos y exigen un compromiso por escrito. Se reunirán hoy por la tarde para valorar la paralización momentánea del asunto. La presidenta de la APA, Ana María Moyano, aseguró ayer que son solidarios con los toxicómanos, pero matizó que el lugar que se pretende utilizar "no es el más adecuado, ya que entre los niños y este lugar en el que se facilitan jeringuillas sólo separa una ventana".

El representante del ayuntamiento en el Consejo Escolar del colegio, Vicente Fernández, señaló que uno de los problemas es que se derruyó el anterior centro de ayuda a los toxicómanos antes de que estuviera clara una nueva ubicación. Fernández aplaudió el interés de la alcaldesa, Rosa Aguilar, por buscar alternativas. Aun así, los padres han dado de plazo hasta mañana para obtener ese compromiso por escrito. De lo contrario, retomarán las medidas de presión.