Una concejal del PP de Elche se va diciendo que no puede seguir en un partido que desoye a la mayoría

"Mi conciencia no me permite seguir representando a un partido que ha desoído las resoluciones de la ONU y a la mayoría de los ciudadanos de este país", declaró ayer María José Quero, concejal del PP del Ayuntamiento de Elche, para justificar su decisión de abandonar el Grupo Popular del Consistorio ilicitano.

La edil aseguró que terminará la legislatura en el Grupo Mixto para cumplir su compromiso con los ciudadanos en "apoyo de la paz y contra esta guerra ilegal que no cuenta con el respaldo de la mayoría de los ciudadanos." Quero también cimentó su decisión de desvincularse de esa formación en las continuas desavenencias con el resto de miembros del Grupo Popular. "Es difícil fiarse del PP [local] por su situación de fragmentación" y porque "no ha sido capaz de trabajar tanto como la única concejal de Esquerra Unida de Elche". Quero aclaró que no ha abandonado antes el partido por su confianza en la política nacional del PP, hasta que se decepcionó por el apoyo del presidente José María Aznar a la guerra en Irak.

La concejal afirmó que "han sido continuas las discrepancias con la actuación política llevada a cabo por parte de mi grupo (...) y sobre todo al acatar criterios dictados por el partido a nivel provincial y regional, en contra de los intereses de los ciudadanos". Quero explicó que la fragmentación del grupo municipal obligaba a la dirección del PP en Alicante y Valencia a tomar resoluciones para dirigir la política municipal, ante la incapacidad de los responsables locales. La edil adelantó que en las próximas horas presentará su renuncia al PP.

Por su parte, el portavoz municipal del PP, Rafael Ramos, indicó que Quero debería dejar su acta de concejal y que, de no hacerlo, demostraría que se mantiene por dinero. Ramos apuntó que la marcha del partido de la edil no viene "por la repulsa a la guerra, sino por su descarte en la lista del PP para las próximas elecciones" y ante la falta de compromiso y trabajo de estos años. Al respecto, Quero afirmó que no mantenía su puesto como concejal por "las 30.000 pesetas mensuales" que gana y que "desde el principio de la legislatura sabía que no iba a repetir en la lista, porque los concejales que no acatan las premisas del partido siempre son incómodos".

[El presidente regional del PP, Eduardo Zaplana, afirmó que la dimisión de la edil, a la que dijo no conocer, "para nada afecta a un partido unido y fortalecido en la dificultad"].

Mientras, la protesta contra la guerra se oyó de nuevo anoche en Valencia, en el barrio de El Carme, con una nueva cacerolada de los vecinos.