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El endeudamiento de las familias subió al 80% de su renta en 2002

El Banco de España alerta de que los créditos se han duplicado desde 1995

El Banco de España (BE) calcula que el endeudamiento de las familias alcanzó el 80% de su renta disponible en 2002, y advierte de la velocidad a la que ha ido aumentando desde 1995, cuando el volumen de deuda entre la renta disponible era del 45%. El director general del Servicio de Estudios del BE, José Luis Malo de Molina, apunta que la capacidad financiera de las familias está en mínimos por la caída del ahorro y la carestía de la vivienda.

José Luis Malo de Molina explica en un artículo en la revista del Colegio de Economistas que el endeudamiento de las familias no representaría ningún peligro significativo si se tratase de un mero ajuste transitorio para alcanzar el endeudamiento óptimo y coherente con el nuevo escenario de bajos tipos de interés a largo plazo, pero indica que existen "elementos de inercia" que están relacionados con la enorme importancia del crédito para la adquisición de vivienda, que creció en 2002 por encima del 15%.

De hecho, Malo de Molina apunta que la capacidad de financiación de las familias se encuentra en "mínimos históricos" como consecuencia de la caída de la tasa de ahorro y del elevado dinamismo de la inversión en vivienda. En concreto, explica que el ahorro global de las familias equivale prácticamente a los pagos de amortización de las hipotecas contraídas para la adquisición de vivienda, de tal manera que los hogares españoles "carecen de un colchón significativo de ahorro disponible" para hacer frente a situaciones adversas.

Descensos en la vivienda

Malo de Molina indica que la mayor vulnerabilidad de las familias procede de la evolución del precio de la vivienda, que acumula un aumento del 62% entre 1998 y 2002. En su opinión, este incremento se debe a la subida de la renta per cápita y de la tasa de ocupación, el descenso de los costes de financiación y el incremento de la población en edad de formar un hogar como consecuencia del baby-boom de los setenta y de la fuerte inmigración reciente.

"No parece apropiado, por tanto, pensar que la revalorización pueda achacarse fundamentalmente a una inversión especulativa que estaría alimentando una burbuja, que más pronto o más tarde habría de explotar de forma brusca o traumática", subraya. No obstante, afirma que el precio de la vivienda está sobrevalorado y debe corregirse. Para el responsable del Banco de España, esta corrección se verá impulsada por el elevado ritmo de construcción de viviendas en los últimos años y por el alto nivel de endeudamiento de sus demandantes.

Así, señala que dicha corrección debería ser "ordenada", con suaves descensos de precios en términos reales y acompañada por una caída del crédito.

Por otro lado, considera que la recuperación de la economía española en 2003 se mantendrá dentro de "cotas moderadas", ya que no puede alcanzar los ritmos de expansión que se registraron durante el último auge porque ya no puede contar con impulsos monetarios "tan potentes", ni con estímulos procedentes de la fuerte revalorización de la riqueza financiera e inmobiliaria, ni con una relación cambiaria tan favorable como la que presidió el ingreso y los primeros años de pertenencia a la UEM.

Malo de Molina señala que la economía española presenta una serie de "debilidades", debido a que prevé una caída del gasto de las familias en consumo y en vivienda, así como en los proyectos de infraestructuras, que son los que han sostenido las tasas de crecimiento positivas. Por ello, indica que es "obligado" profundizar en la capacidad exportadora de la economía española para compensar esas debilidades.

Construcción de viviendas en Madrid.
Construcción de viviendas en Madrid.RAÚL CANCIO

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