Almudín

Almudín, SA, de Ediciones y Publicaciones, fue una curiosa sociedad anónima que funcionó en Valencia durante algunos años, desde finales de los setenta, contando con numerosos accionistas, y en cuyo consejo de administración se sentaron cierto tiempo diversos socios como, entre otros, Vicent Ventura, Juan José Pérez Benlloch, Juan Gabriel Cort, o quien aquí escribe relatando aquella efemérides.

Como recordaba hace unos días Rafael Prats Rivelles, por estas fechas se cumple el veinticinco aniversario de la aparición, en aquel entonces, de una cartelera de espectáculos editada por la citada sociedad, Qué hacer y dónde ir, popularmente conocida como Qué y Dónde. En ella semanalmente colaboraba desde Sueca, como único medio de comunicación valenciano en el que lo hacía, y en su página principal, con breves y sagaces comentarios sobre la actualidad política y social, Joan Fuster. A continuación procedía la información teatral, cinematográfica, y cultural en su sentido más amplio, en la que participaban numerosos jóvenes periodistas valencianos, junto al citado Prats, como entre otros Anna Senent o Josep Torrent.

En aquellos primeros años de la democracia nos impulsaba la perspectiva de la recuperación del país

Más adelante la actividad de la editorial se fue diversificando, y se editaron dos espléndidos libros de comics, sobre la Història del País Valencià contando con la colaboración del club Jaume I, hoy todavía afortunadamente activo, con textos de Ricard Blasco, e ilustraciones de Enric García, Toni Laveda, Joan Josep Tornero y Josep Lluís Esparza y más tarde Jaume I, con textos de Manuel Cerdá, e ilustraciones de los citados García, Laveda y Tornero.

También la edición de libros de bolsillo fue tomando cuerpo, y con mayor o menor suerte se fueron editando en pequeño formato desde la Aproximación a Joan Fuster de Manuel Lloris, a la misma Qüestió de noms, i altres escrits del propio Fuster, pasando por Los años 30: Crisis económica y derecha valenciana, de Jordi Palafox, Crecimiento urbano y especulación en Valencia de Josep Sorribes, La industrialización valenciana: historia y problemas de Aracil, Carnero, García Bonafé, Palafox y Ventura, o Dos estudios sobre el País Valenciano de Emili Giralt, por citar unos cuantos.

Toda una actividad cultural iba desgranándose dando sus frutos, tal vez escasos pero significativos, y se funcionaba más o menos bien mediante la celebración de reuniones que normalmente tenían lugar de manera periódica en la calle Cambrils, donde se encontraba la imprenta y más tarde se editarían los periódicos.

Incluso se ganaba dinero, y así se estuvo durante algún tiempo, hasta que la caída editorial del Diario de Valencia situó a los principales accionistas de Almudín, SA, de Ediciones y Publicaciones, ante la tesitura de embarcarse en una nueva aventura editorial para hacer frente a las expectativas creadas tras la desaparición del Diario de Valencia, y atendiendo a las posibilidades de funcionamiento de un nuevo diario en Valencia, cual sería poco más tarde Noticias al día.

Ésta fue la animosa decisión adoptada en su momento, y que fue comandada al alimón por Juan Gabriel Cort en la parte administrativa y Juan José Pérez Benlloch en la dirección periodística, quienes mejor podrían informarnos al respecto de los avatares por los que pasaron. Las dificultades a las que tuvieron que hacer frente fueron insalvables, y los resultados desfavorables llevaron a la desaparición del periódico Noticias al día, y con ello también a la finalización de la aventura empresarial que había inspirado durante varios años a la citada empresa, mediante una labor editorial y de publicaciones llevada a cabo en aquellos primeros años de la democracia, en los cuales, como hoy, nos impulsaba fundamentalmente la perspectiva de la recuperación del país.

No obstante también hoy, bastante años más tarde de aquellos hechos, reconforta pensar que se hizo lo que se creía más conveniente, y estimula recordar la cabecera de aquellos periódicos que las circunstancias llevaron a poner diariamente en los quioscos de prensa, con mucha ilusión, y mayor esfuerzo principalmente por parte de Cort y Pérez Benlloch.

Así como repasar la portada de la cartelera que semanalmente incluía los agudos comentarios de Fuster, y también la colección de libros editada con sustanciosos títulos como hemos visto. En definitiva que en la celebración del señalado aniversario confiamos en mantener el espíritu que guiaba también aquellos otros de comics, del que todavía pretendemos disfrutar, y adoptar análoga disposición ante nuevas iniciativas, confiando eso sí con mayor éxito en el intento.

Alejandro Mañes es licenciado en Ciencias Económicas y Derecho.