Los 'efectos colaterales' en el PP

No por esperada, la marcha del ex ministro Manuel Pimentel ha dejado de impactar en el PP andaluz, una formación que se está acostumbrando a vivir en permanente incertidumbre. La baja voluntaria como militante de a pie del ex ministro corona un mes crítico en el que el PP ha tenido que capear el pésimo resultado que le daban las encuestas el pasado 28 de febrero, Día de Andalucía, y los efectos colaterales de la guerra contra Irak: un goteo de fugas de concejales (siete) y afiliados (más de 40) que ha culminado con la salida de Pimentel.

Ante esta situación, la dirección regional cierra filas, aunque no deja de reconocer la mala época por la que está atravesando. Y por este motivo la marcha de Pimentel ha dolido aún más. "Ha elegido el momento más difícil para el PP", afirma un dirigente provincial. "Se ha ido cuando más daño nos hace, para desestabilizar", añade molesto un miembro de la dirección regional.

El PP andaluz interpreta la marcha de Pimentel como el colofón al desencuentro entre éste y Javier Arenas, ministro de Administraciones Públicas, un desencuentro que ninguno de los dos protagonistas ha explicado por qué se ha producido. El distanciamiento comenzó cuando, en la víspera de las elecciones generales de 2000, Pimentel dimitió como ministro de Trabajo por las irregularidades que se imputaban a un colaborador suyo.

Esta ruptura definitiva se produce justo diez años después de que Arenas y Pimentel empezasen a poner patas arriba el PP andaluz con el fin de cimentar una formación con opciones a ser alternativa de gobierno en Andalucía. Este proyecto parece pasar ahora por una de sus fases más complicadas y las claves que señalan los dirigentes consultados son distintas.

Algunos apuntan directamente a la falta de un liderazgo claro en Andalucía, ya que la presidenta regional y candidata autonómica, Teófila Martínez, no ejerce este papel en el día a día, entre otras cuestiones por su compromiso como alcaldesa de Cádiz. Por contra, otros militantes, entre los que se encontraba Pimentel, estiman que la situación actual es consecuencia de que Arenas no ha dejado de ejercer una tutela efectiva sobre el PP en Andalucía.

Tras anunciar su baja como militante del PP en un artículo publicado el domingo en los periódicos del Grupo Joly por su oposición a "una guerra ilícita", Pimentel ha optado por la discreción. Ayer se limitó a hacer unas declaraciones a la agencia Efe en las que subrayó que "no sólo la izquierda está contra esta guerra contra Irak sin autorización de la ONU". La baja como militante se hizo efectiva ayer mismo, después de que el presidente del PP de Sevilla, Ricardo Tarno, recibiese la carta de Pimentel en la que éste le comunicaba su intención. En estas declaraciones, el ex ministro afirma que trabajará "desde la independencia por las ideas" que siempre ha defendido, "con la certeza de que hoy, más que nunca, hay que recuperar el espacio de centro".

Ya en el artículo en el que anunciaba su marcha, Pimentel dejaba abierta la puerta a la política, pese a que en estos momentos está absorbido por sus proyectos empresariales. "Quizá, si en el futuro naciera un partido de centro que se esforzara en superar la crispación y división en la que está cayendo nuestra sociedad, volvería a adoptar un nuevo compromiso. La política siempre fue necesaria. Ahora, más que nunca", concluía Pimentel su artículo.

Esta afirmación ha dado pie a distintas hipótesis, aunque una persona cercana a Pimentel apuntaba ayer que es difícil que éste se incorpore a un nuevo proyecto político. La dirección regional también está convencida de que Pimentel no va a embarcarse en el futuro en una aventura política, pero un dirigente provincial no ve descabellada esta posibilidad. "Antes de las elecciones municipales no lo va a hacer, pero después...", afirmaba este dirigente.

Ayer mismo hubo quien se apuntó a esta posibilidad: Enrique Bellido, ex presidente del PP de Córdoba y ex militante de esta formación, afirmó, en declaraciones a Servimedia, que Pimentel sería un "gran candidato" a la Junta de Andalucía.