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Reportaje:Apuntes

Un 'aula' del cielo

La Universitat adquiere un telescopio Trobar que hace más competitiva la investigación y la divulgación científica

¿Quién no desearía poder mirar al cielo durante horas, sin que se desdibuje su imagen? Alcanzar estrellas variables como las Delta Scutis o las Cefeidas..., "sin que desaparezcan en unas pocas horas"; observar toda clase de "objetos colapsados" (estrellas de neutrones en binarias, candidatos a agujero negro); o descubrir núcleos galácticos activos, está casi al alcance de la mano. El Observatorio Astronómico de la Universitat de València, que dirige Vicent J. Martínez García, ha adquirido el telescopio robótico Trobar, que ya se ha terminado de ensamblar en los talleres de Teleskoptechnik Halfman de Alemania, para ser traslado en unas semanas al centro astronómico que la universidad comparte con la Asociación Valenciana de Astronomía en la localidad de Aras de los Olmos, a 1.300 metros de altitud sobre el nivel del mar.

Entre los objetivos de Trobar destaca la búsqueda de planetas extrasolares
"Permite controlarlo remotamente por Internet y observar en tiempo real con un ordenador"
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El Centro Astronómico de Valencia tendrá un telescopio robótico

"Trobar se dedicará también a la búsqueda de contrapartidas ópticas de estallidos de rayos gamma", anticipa el profesor Martínez, quien recuerda que "el uso en cosmología de telescopios de este tamaño -algo que era impensable hace 10 años- es ahora posible gracias al estudio de estas misteriosas explosiones que ocurren a distancias cosmológicas y liberan energías comparables a la de una galaxia entera en pocos minutos". Es decir, que "su alta luminosidad, unida a la velocidad de reflejos necesaria para observarlos antes de que desaparezcan en horas hace que este tipo de telescopios robóticos, como Trobar, sean ideales para su observación".

El telescopio robótico Trobar posee un potente reflector de 60 centímetros de abertura de última generación y totalmente automatizado. Este telescopio ha sido cofinanciado a partes iguales por la Oficina de Ciencia y Tecnología de la Generalitat Valenciana y por la Universitat, mediante una oferta pública que salió concurso por 168.000 euros. Pese al interés de una importante empresa catalana por construirlo, su construcción fue adjudicada a la empresa alemana

Teleskoptechnik Halfman. El concurso reveló que "las empresas españolas no tienen capacidad para hacer un telescopio con un potente reflector de 60 centímetros de diámetro. La firma catalana sólo tenía capacidad para uno de 50 centímetros", explica el profesor.

Trobar es un telescopio robótico. ¿Qué significa esto y qué ventajas tiene? Martínez lo explica con claridad meridiana: "Que puede actuar de forma autónoma siguiendo una secuencia de trabajos preprogramada, lo que permite que se pueda controlar y utilizar remotamente a través de Internet al mismo tiempo, permitiendo realizar observaciones en tiempo real desde cualquier ordenador conectado a la red".

Esta característica es, precisamente, la que lo hace ideal para tareas de divulgación astronómica. De ahí surge el proyecto el Aula del Cel para divulgar la astronomía entre los escolares de primaria y secundaria, mediante un convenio con la Consejería de Educación, por el que se crea un Gabinete Didáctico que tendrá un profesor de instituto a tiempo completo y técnico de laboratorio. El proyecto incluye el uso del telescopio en los programas de educación. "El Aula del Cel es un proyecto educativo que tiene por finalidad llevar la Astronomía a las aulas de la Comunidad Valenciana", detalla el profesor.

Pero también es un lugar de encuentro: un espacio físico dedicado a la enseñanza y divulgación, para impulsar y estimular la curiosidad del alumno por el cosmos y su deseo de comprender el Universo. Es por ello que "el aula estará localizada en las dependencias del Observatorio Astronómico, y estará preparada con todo tipo de material de calidad para la divulgación de la Astronomía; además de que contará también con una sala de proyección de audiovisuales".

Así el aula, según el convenio firmado con Educación, se impartirán sesiones didácticas y actividades especialmente diseñadas y enfocadas a los alumnos de enseñanzas primaria y secundaria. El Gabinete Didáctico, dedicado a pleno rendimiento a preparar los materiales, será el encargado desarrollar y diversificar un programa adaptado a las diferentes edades, en coordinación con el profesor del grupo de alumnos visitantes, "haciendo especial hincapié en la difusión de los últimos descubrimientos astronómicos". Adicionalmente, el proyecto también se programarán sesiones de observación astronómica en centros docentes y se organizarán actividades de Formación de la Astronomía encaminadas exclusivamente al profesorado de este nivel educativo.

Con todo, es gracias a la precisión de apuntado del telescopio y a la excelente calidad de su óptica, lo que hace que "su principal dedicación será para la investigación astronómica". Entre los objetivos científicos de Trobar destaca "la búsqueda de planetas extrasolares, planetas que giran en torno a otras estrellas distintas del Sol". "El método es sencillo: se mide el oscurecimiento de la luz de la estrella que produce el planeta al pasar por delante". Trobar también tendrá algo que decir en Astrometría, ya que la abertura y calidad óptica del telescopio permite descubrir y observar objetos débiles, como los asteroides NEA (Near Earth Asteroids o asteroides cercanos a la Tierra), así como los objetos que componen el cinturón de Kuiper, uno de los últimos restos de la formación de nuestro sistema solar.

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