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La crisis bélica y los resultados empresariales hunden las bolsas

Francfort perdió el 4,2% en una nueva jornada de mínimos

Las bolsas mundiales han entrado en una espiral de caída libre con nuevos mínimos en sus indicadores. A la crisis bélica ayer se sumaron los malos resultados de grandes compañías como Deutsche Telekom o EADS. Francfort lideró las pérdidas al caer el 4,22%, el Ibex se dejó el 2,57%, París el 2,38% y Londres el 1,59%. Las bolsas estadounidenses registraron fuertes caídas. El índice industrial Dow Jones perdió el 2,22%.

Los inversores huyen de las bolsas a toda velocidad, dejando tras de sí un rastro desolador. Los mercados bajan en picado y nadie se atreve a pronosticar dónde está el suelo de esta caída. Hay que remontarse a seis e, incluso, siete años, para encontrar las bolsas en los niveles actuales. El mercado alemán fue ayer el más castigado, con una caída del 4,22%, y acumula una pérdida en el ejercicio del 19,48%.

El resto de bolsas europeas registró descensos más moderados con el 2,57% de la Bolsa española, el 2,38% de París y el 1,59% de Londres. Pronunciadas caídas que se producen con modestos volúmenes de contratación. En los mercados estadounidenses también se registraban caídas significativas. El índice de valores industriales Dow Jones perdió el 2,22% de su valor, mientras que el Nasdaq se dejó el 2,06%. Así, el indicador de los valores tecnológicos cotizaba ya a 1.278 puntos, muy lejos de los máximos que marcó hace ahora tres años cuando comenzó el estallido de la burbuja tecnológica. En estos tres años ha perdido el 75% de su valor, muy lejos de los 5.000 puntos que alcanzó su índice en plena euforia.

Récord de pérdidas

Las razones de esta aversión que muestran los inversores al riesgo bursátil se encuentran en la crisis bélica entre Estados Unidos e Irak. Los inversores están cada vez más convencidos de que el ataque se producirá con independencia de la resolución de Naciones Unidas. Mientras, en el plano macroeconómico no hubo noticias de consideración que influyeran sobre los inversores; las empresariales sí vinieron a ensombrecer aún más el panorama de la renta variable.

La operadora alemana de telecomunicaciones Deutsche Telekom sufrió en 2002 unas pérdidas netas récord en la historia de una compañía alemana y del conjunto de las europeas, cifradas en 24.600 millones de euros, atribuidos al pago de elevadas amortizaciones. La Bolsa alemana cotizó esta noticia con un retroceso del 9,58%.

Por su parte, el grupo aeroespacial EADS prevé suprimir 1.700 empleados en su división espacial, que perdió 268 millones de euros el pasado ejercicio. También se conocieron informes negativos sobre el sector asegurador europeo que hicieron mella en el conjunto de compañías.

Los refugios volvieron a funcionar. El euro alcanzó los 1,105 dólares, en tanto que el oro subió el 1% hasta los 354 dólares por onza. También el dinero buscó el refugio de la deuda, donde el bono español a 10 años se colocó ayer con una rentabilidad del 3,81%. Respecto al petróleo, el barril brent alcanzó en el mercado londinense los 34,5 dólares, para cerrar la jornada con un suave recorte hasta los 34 dólares por barril.

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