La Acadèmia no alcanza un acuerdo para elegir secretario

Las expresiones relativas al Vaticano han hecho mella en el seno de la Acadèmia Valenciana de la Llengua. Ayer se volvió a recurrir a ellas para explicar que el pleno no fue capaz de designar un nuevo secretario dado que ninguno de los tres candidatos obtuvo la mayoría absoluta. Si con anterioridad los esforzados y polisémicos pactos alcanzados se inscribían en la "diplomacia vaticana", según un irónico académico, lo de ayer no dio lugar a la vaticana "fumata blanca", según la presidenta de la AVL, Ascensión Figueres. Es decir, después de tres votaciones no se eligió al sustituto del añorado Alfred Ayza, fallecido hace unas semanas. Sin embargo, no pareció muy contrariada la presidenta, que anunció la apertura de un periodo máximo de un mes para convocar otro pleno extraordinario para poder pronunciar el particular "habemus papam".

Ni Artur Ahuir (académico por el cupo del PP), ni Honorat Ros ni Jordi Colomina (ambos por el PSPV), los tres que presentaron candidatura, consiguieron la mayoría absoluta necesaria. Ésta se estableció finalmente en 11 votos, en virtud del informe aportado por el asesor jurídico de la AVL, el aún Letrado de las Cortes, Lluís Aguiló. No es baladí. La AVL está formada por 21 académicos, pero ahora sólo cuenta con 19, debido a la renuncia de Xavier Casp y a la muerte de Ayza, pero la mayoría absoluta sigue siendo la original.

Asumida la decisión, se procedió a las votaciones que implican otros adjetivos. A saber: secesionista (que defiende que el valenciano y el catalán son lenguas diferentes) y unionistas (que abogan por la tesis académica contraria), si bien esta diferenciación al uso de algunos académicos no es del agrado de todos, sean por el PP o el PSPV, porque consideran que se ha superado, debe superarse o porque es demasiado maniquea. En la primera votación secreta, Ahuir (dentro de los secesionistas) obtuvo siete votos, por seis Colomina (dentro de los unionistas), cinco Ros (unionista) y uno blanco; en la segunda, Ahuir ocho, Colomina seis, y Ros cinco. Para la tercera, Ros renunció y en el enfrentamiento final, Colomina consiguió nueve votos, por siete Ahuir, además de dos blancos y uno nulo.

Los resultados volvieron a poner de manifiesto que la actual mayoría de 10 académicos designados por el PSPV (que incluye a los seis miembros del Institut Interuniversitari de Filologia Valenciana) no vota en bloque, mientras que los siete del PP sí, y los dos de consenso, unas veces sí y otras no. Algunos académicos achacan este comportamiento a supuestos pactos con trasfondo político entre la presidenta y el vicepresidente, el socialista Josep Palomero; otros, que obedece a la normalidad, a los distintos criterios en el seno de la AVL.

En cualquier caso, Figueres y Palomero señalaron que el pleno había transcurrió con "cordialidad". "Era legítimo que se presentaran más de un candidato y el hecho de que hoy [por ayer] no se haya alcanzado un consenso no influye en la actividad de la Acadèmia". Actualmente, Ahuir, vocal de la junta de gobierno, ejerce de secretario por ser el más joven, según estipula la ley.

Precisamente, Ahuir mostró tras el pleno su intención de presentar próximamente su candidatura Algunas fuentes señalan que Ahuir es el candidato preferido por la presidenta, si bien ésta reiteró ayer que no había ejercido su derecho a presentar un candidato.

Ya en la calle, un académico apuntaba que cuando se cierra un camino para elegir un cardenal o canónigo se busca otro camino.