_
_
_
_
BALONCESTO | NBA

El mes mágico de Bryant

La estrella de los Lakers, el más joven (24 años) en la historia en totalizar 10.000 puntos

Los trazos de la copia cada vez se asemejan más al original. El alumno ya es capaz de crear obras maestras similares a las del genio. El cuadro que Kobe Bryant, alero de Los Ángeles Lakers, ha dibujado en el último mes podría llevar la firma del mismísimo Michael Jordan. Sí, otra vez hay debate. De nuevo, se les compara. Sin que haya nada odioso en ello. Un halago más que una carga.

Nueve partidos consecutivos por encima de los 40 puntos, trece con más de 35. Éstas son las credenciales de Bryant en febrero. Ha completado el segundo mes del año con una media de 40,6 tantos por encuentro. Con 24 años y 193 días, ya ha alcanzado la cifra mágica de los 10.000 puntos en la NBA. Nadie había sido tan precoz, nadie había alcanzado esa cantidad a una edad tan temprana. Y es que Bryant, a pesar de su juventud, ya es un veterano que lleva siete años en la Liga norteamericana y ha ganado tres títulos.

Más información
El escudero de Duncan
San Antonio pone fin al reinado de los Lakers

Los que han tenido la oportunidad de verle jugar en estas últimas fechas no salen de su asombro. Jordanesco sería una buen adjetivo para definirlo. Algo más que movimientos deslumbrantes y físico poderoso. Una rara combinación de habilidad, competitividad, encanto y serenidad bajo presión. Voluntad y deseo engarzadas en una maestría poco común. Los que estiman exagerada esta loa argumentan que para demostrar todo esto necesita lanzar a canasta más de cuarenta veces durante un partido, como lo hizo ante el San Antonio Spurs.

La soberanía de los Lakers ha virado, al menos en el último mes, hacia Bryant. Shaquille O'Neal gotea su poderío en dosis pequeñas. Consciente de los altibajos del gigante, fue Phil Jackson el que concedió a Bryant la primera opción ofensiva. "Tengo una misión clara. Phil me ha dado instrucciones simples. Quiere que meta el balón en el aro", reconoce el jugador.

Claro está que todo tiene un límite. Al técnico no le gustó nada que, a pesar de anotar 44 puntos en la derrota ante los Spurs, Bryant sumara 41 tiros a canasta y perdiera siete balones. "Parecíamos un equipo de un solo jugador. Veinticinco lanzamientos es una cifra razonable. Creo que se ha pasado de la raya. Pero, bueno, el chico ha trabajado duro. Intentaremos jugar más equilibrados la próxima vez", comentó Jackson tras el encuentro.

No tiene de qué quejarse el entrenador. Gracias, en gran parte, al juego de su estrella, el equipo se ha aupado a la séptima posición de la Conferencia Oeste tras un inicio espantoso en el campeonato.

Pero en toda esta exhibición de Bryant hay algún mal pensado que ve gato encerrado. En estos días, Reebook y Nike negocian un contrato para calzar a la estrella de los Lakers. El buen rendimiento del jugador en las últimas semanas podría estar relacionado con un aumento de sus pretensiones económicas. "No, no tiene nada que ver. Desde el primer día, el precio ha sido muy alto", ha bromeado el baloncestista.

Lo cierto es que Reebook parece que se ha retirado de la puja, ya que considera desorbitada la cantidad solicitada por el alero, comparado en la cancha con Jordan, pero nada que ver en cuanto al impacto comercial. Expertos en márketing creen que Bryant no conecta con la juventud negra, que es la gran consumidora de zapatillas deportivas. Ha vivido en Europa y habla italiano. Demasiado distante, demasiado pijo. Intentó dulcificar su imagen ante los jóvenes con un disco de hip hop, pero no le dio resultado.

Un mate de Bryant.
Un mate de Bryant.REUTERS

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_