El PSOE denuncia el contrato "irregular" del hijo del vicepresidente del Parlamento andaluz por el PP

El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Palos de la Frontera (Huelva), Guillermo Molina, va a preguntar al alcalde de esa localidad y parlamentario andaluz por el Partido Popular, Carmelo Romero, sobre las condiciones en las que ha contratado como aparejador del Consistorio al hijo de Matías Conde, vicepresidente primero de la Mesa del Parlamento andaluz por el PP. El contrato de Javier Conde Quintero, de 30 años, con fecha de 1 de enero de 2003, se ha realizado de forma irregular, sin someterse a oferta de empleo público como es preceptivo en la administración, según Guillermo Molina.

El hijo de Matías Conde -ex presidente del PP de Huelva- tampoco figura como persona de confianza del alcalde, un tipo de contrato que sólo puede realizarse en el inicio de cada legislatura. "El alcalde ha zanjado este tema sin más, a su estilo. Lo ha contratado y ya está. Carmelo Romero representa lo más rancio del PP, dentro y fuera de Huelva", afirmó Guillermo Molina.

El concejal socialista está convencido de que Carmelo Romero únicamente persigue con este contrato intereses personales. "Matías Conde es el mentor de Carmelo Romero, quien lo ha protegido siempre y lo introdujo en su día en política", indicó.

Romero está considerado como un político en ascenso en el PP de Huelva, partido que desde septiembre de 2000 está sumido en una profunda crisis interna. El portavoz socialista entiende que Romero está intentando asegurarse su futuro político con esta contratación. El alcalde se ha negado a facilitar a los partidos de la oposición municipal y a los sindicatos una copia del contrato realizado al hijo de Matías Conde.

"Política impresentable"

Éste replicó ayer a la denuncia del portavoz socialista. "Esto forma parte de una política impresentable del PSOE, surge de unos personajes, como Guillermo Molina, que no son capaces de ganar unas elecciones en condiciones normales y recurren a este tipo de historias. Yo voy a preguntar ahora vía parlamentaria para que me informen sobre cómo Guillermo Molina ha llegado a funcionario de la Diputación de Huelva".

Esta polémica ha surgido en un momento de fuerte crispación en el Ayuntamiento de Palos, donde un grupo de representantes sindicales de los trabajadores mantiene desde hace un mes un encierro indefinido en el salón de plenos.

Molina también criticó que entre las últimas contrataciones realizadas por Romero figuran seis personas que se presentaron como candidatos a concejal en la lista del PP en las elecciones municipales de 1995 y 1999 y finalmente no fueron elegidas. "Denunciamos la política clientelista de Carmelo Romero, que utiliza sin disimulo a los trabajadores como moneda de cambio de votos", afirmó ayer Molina.